La 1.a Brigada de Asistencia de Fuerzas de Seguridad (SFAB en inglés) del Ejército de los EE. UU. desplegará el 1.º de junio un equipo de asesores en Colombia, para apoyar la cooperación en operaciones reforzadas antinarcóticos, que llevan a cabo los EE. UU. con las fuerzas de seguridad de Colombia.
El equipo de asesores de la brigada, del tamaño de una compañía, brindará apoyo militar a los esfuerzos diplomáticos y de desarrollo entre los EE. UU. y Colombia, mediante entrenamiento, asesoramiento y asistencia a las unidades anfitrionas, incluyendo capacidades de fortalecimiento cruciales para la cooperación reforzada antidrogas entre ambos países.
Es la primera vez que un equipo de asesores de la SFAB brinda sus servicios a un país socio de la región. Además, prestará apoyo a la Operación Reforzada Antinarcóticos que anunció el 1.º de abril el presidente de los EE. UU., Donald Trump.
“La misión de la SFAB en Colombia es una oportunidad para mostrar nuestro compromiso mutuo contra el narcotráfico y el apoyo a la paz regional, el respeto por la soberanía y la promesa duradera de defender ideales y valores compartidos”, expresó en un comunicado el Almirante de la Marina de los EE. UU. Craig S. Faller, comandante del Comando Sur de los EE. UU.
Los miembros de la SFAB reciben educación especializada en la Academia de Capacitación de Asesores Militares en Fort Benning, EE. UU., donde aprenden a ayudar a las fuerzas militares profesionales de países socios y aliados de los EE. UU., en función de las necesidades operativas e institucionales. Los militares están capacitados y equipados para evaluar, apoyar, asesorar y colaborar con socios de defensa y seguridad en todo el mundo.
En Colombia, el equipo trabajará con unidades anfitrionas en zonas designadas como “áreas prioritarias” por el Gobierno colombiano, enfocándose en capacidades de logística, servicios e inteligencia, para proporcionar apoyo directo a los esfuerzos de colaboración antinarcóticos e intercambio de información entre los EE. UU. y Colombia.
Una vez que el equipo llegue a Colombia, deberá cumplir con los protocolos obligatorios de bioseguridad y aislamiento preventivo de 14 días que estableció el país, para mitigar el impacto del virus COVID-19. El equipo permanecerá con sus unidades anfitrionas según lo determine la evaluación de la cúpula militar de los EE. UU. y Colombia.
Los EE. UU. y Colombia tienen un largo historial de apoyo a soluciones cooperativas y respuestas de colaboración ante desafíos de seguridad y amenazas que conciernen al hemisferio occidental.