Un reporte de la cadena estadounidense NBC News indicó, el 4 de septiembre de 2021, que hace dos años el Gobierno de los Estados Unidos comenzó a cuestionar las acciones de un empresario chino para comprar la isla Perico, en El Salvador.
El proyecto Oportunidades Compartidas, Futuro Compartido, para desarrollar una zona económica especial a lo largo de la franja costera de El Salvador, y construir un puerto de aguas profundas y una zona manufacturera, es representado por la empresa Estatal china Asia Pacific Xuanhao, indicó en septiembre de 2019 The New York Times. Esta empresa fabricante de alta tecnología está vinculada al Ejército chino, aseguró el diario guatemalteco El Periódico.
La zona económica especial permitiría a China avanzar sus planes para establecer una ruta comercial alternativa al Canal de Panamá, y mejorar sus intereses en la región. También le daría a Pekín una valiosa posición para expandir sus capacidades militares y de inteligencia en Latinoamérica, precisó The New York Times.
“La influencia china es global. Está en todas partes del hemisferio, y avanza de manera alarmante”, dijo el 4 de septiembre en entrevista a NBC News el Almirante de la Marina de los EE. UU. Craig S. Faller, comandante del Comando Sur de los Estados Unidos (SOUTHCOM).
El diario El País de España reportó que China, a través de su misión expansionista de la Nueva Ruta de la Seda, pretende además construir un aeropuerto y zonas turísticas en un área de 2800 kilómetros cuadrados entre puerto La Libertad y el puerto de La Unión, en el Golfo de Fonseca, en El Salvador.
Buscando puertos
Desde México hasta Uruguay, Pekín ya controla muelles y tiene proyectos portuarios nuevos, muestra el portal del Observatorio Económico Latinoamericano (OBELA), con sede en México. “Estos proyectos en la región caribeña y centroamericana prendieron las alertas (…) sobre las empresas estatales chinas y su actividad depredadora en la región”, asegura OBELA.
En 2018, Asia Pacific Xinhuao buscó arrendar por 100 años el 13 por ciento del territorio salvadoreño en el puerto La Unión, y solicitó exenciones fiscales con vigencia de 30 años para sus empresas, detalló The New York Times.
“China busca convertir el puerto La Unión en un centro logístico regional operado por empresas chinas, que excluirían a las empresas ya establecidas en El Salvador, principalmente estadounidenses y europeas”, dijo a NBC News Evan Ellis, profesor de estudios latinoamericanos del Instituto de Estudios Estratégicos de la Escuela de Guerra del Ejército de los Estados Unidos.
Ellis señaló que China apunta a utilizar el puerto y las zonas comerciales para importar productos chinos y distribuirlos a otros mercados centroamericanos, empleando empresas chinas para almacenar estos bienes.
Amenaza para Honduras
El “proyecto de China en el Golfo de Fonseca es una amenaza para Honduras, al ser el único acceso de Honduras al Pacífico” publicó el 1.º de junio el diario salvadoreño La Prensa. El experto en derecho internacional y en asuntos asiáticos Graco Pérez, dijo a La Prensa que “el proyecto chino desbarata la iniciativa trinacional para desarrollar el Golfo de Fonseca que habían acordado El Salvador, Honduras y Nicaragua, con financiamiento del Banco Centroamericano de Integración Económica”.
El reporte de NBC News aseguró que “China es cada vez más hábil en el uso de sobornos y otras prácticas corruptas para promover sus intereses comerciales, métodos considerados ilegal por las corporaciones estadounidenses”.