La República Popular China (RPC) mantiene su estrategia de infiltración en Latinoamérica en varios frentes, incluyendo el impulso de su tecnología inalámbrica 5G para intentar influir en todos los sectores de la sociedad, informó el sitio argentino de noticias Infobae.
“Es un instrumento dual que sirve para facilitar las comunicaciones, pero al mismo tiempo es utilizado como mecanismo de inteligencia por parte de China”, dijo el 30 de enero a Diálogo Luis Somoza, magíster en Inteligencia y exprofesor de institutos superiores académicos militares de Argentina. “Aceptar ese tipo de tecnología en países latinoamericanos es estar bajo la bota del Partido Popular Chino”.
Según su recientemente publicado estudio Índice de China 2022, Doublethink Lab, una ONG dedicada al estudio de la influencia maligna de China en todo el mundo, la RPC ha estado impulsando progresivamente su influencia en los países latinoamericanos, no sólo intentando crear dependencias, como en el sector económico, o controlar la narrativa mediática (fomentando la dependencia de sus medios estatales, por ejemplo), sino también promoviendo la transformación digital con hardware 5G y tecnología desarrollada por Huawei, ZTE u otras empresas chinas.
Huawei y otras empresas de telecomunicaciones estatales chinas funcionan como una extensión del Partido Comunista Chino (PCCh) y han sido vinculadas a la inteligencia y el ejército de la China, informó CNBC. En 2020, la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) del Gobierno de los EE. UU. designó a cinco empresas chinas, entre ellas Huawei y ZTE, por suponer una amenaza para la seguridad nacional.
En mayo de 2022, Canadá prohibió las tecnologías de Huawei en las redes 5G, una medida que siguió a las prohibiciones o restricciones en los Estados Unidos, Gran Bretaña, Australia y Nueva Zelanda por temor al ciberespionaje, informó NPR.
“Permitir que Huawei, y por extensión el PCCh, desarrolle la infraestructura 5G de Latinoamérica dejaría a la región subordinada a un régimen con un historial probado de militarización de sus relaciones”, escribió Ana Rosa Quintana, analista principal de políticas para Latinoamérica y el Hemisferio Occidental en la Heritage Foundation, un centro de estudios con sede en Washington, D.C., en un informe de principios de 2021.
Tecnología maligna
En un informe de 2021, TOP10VPN, un sitio web de revisión independiente que defiende la privacidad, la seguridad y la libertad en Internet, rastreó equipos de Huawei en 72 países y descubrió que 18 de ellos utilizaban la tecnología como forma de censura. En Cuba, por ejemplo, se descubrió que la tecnología se utilizaba para bloquear sitios web y medios de comunicación independientes.
A finales de septiembre de 2021, el Ministerio de Defensa de Lituania instó a la población a deshacerse de los teléfonos móviles 5G chinos después de que su Centro Nacional de Ciberseguridad descubriera que llevaban incorporadas herramientas de censura y fallos de seguridad, informó la BBC.
“Si Huawei logra imponer y desarrollar redes 5G en Latinoamérica, controlaría esencialmente las comunicaciones, la infraestructura y la tecnología sensible de los gobiernos, ciudadanos y empresas de la región”, escribió Quintana. “El aumento de la velocidad de transferencia amplificaría las capacidades de espionaje del PCC, dejando a los ciudadanos vulnerables a los gobiernos autoritarios y a las industrias abiertas a los secretos comerciales robados”.
En Latinoamérica, algunos países como Argentina buscan dar pasos decisivos para la llegada de la red 5G en sus territorios. Tras el avance del Ente Nacional de Comunicaciones de Argentina, en la aprobación de las bandas de frecuencias para el despliegue de sistemas de quinta generación, desde el organismo proyectan que la licitación del espectro se realizará entre marzo y abril, señaló el diario Tiempo Argentino.
“La idea es empezar a licitar, y el proyecto sería dividir el país en varias áreas y que ninguna empresa se quede con todas esas áreas, pero la zona más interesante es el área metropolitana de Buenos Aires, que concentra el 50 por ciento de la población, donde Huawei tiene acuerdos importantes con empresas argentinas”, indicó a Diálogo Fabián Calle, analista político y profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Austral de Argentina.
Tiempo Argentino destacó que tanto en Chile como en Brasil aparece Huawei como uno de los proveedores protagonistas. En el territorio chileno el despliegue de la red es mayor, y el servicio ya se ofrece comercialmente, al punto que ya hay dos millones de usuarios de telefonía 5G.
En Brasil, la licitación de noviembre de 2021 obtuvo una recaudación de más de USD 1000 millones, pero el grueso de los compromisos de las firmas privadas que participaron en la negociación fue hacia las inversiones a realizar para desplegar las redes, lo que se hizo durante el 2022.
“Estas inversiones de China en Latinoamérica coloca a la región en un situación de mucha fragilidad e inestabilidad en un mundo conflictivo”, finalizó Somoza.