La Cámara de Representantes y el Senado de Georgia reconocieron en forma oficial el 7 de febrero como Día de Columbus (apellido de Colón en EE. UU.), pero no en honor a Cristóbal Colón, sino por la ciudad oriental en ese estado de los EE. UU. “Es para reconocer y honrar la fundación de Fort Benning en su centenario”, manifestó la alcaldesa de Columbus Teresa Tomlinson en un discurso en el Capitolio de Georgia, en Atlanta, el 7 de febrero de 2018.
Fort Benning es sede del Instituto de Cooperación para la Seguridad Hemisférica (WHINSEC en inglés), que se creó en enero de 2001. Tras 17 años de dedicación en mejorar las capacidades de defensa y de las fuerzas de seguridad en el continente americano, el Coronel del Ejército de los EE. UU. Robert F. Alvaro, comandante de WHINSEC, piensa que ya es hora de que la institución suba al siguiente nivel. Para hablar de este y otros desafíos, Diálogo habló con el Cnel. Alvaro en su oficina en el campus de WHINSEC.
Diálogo: El 19 de julio de 2018 cumplirá un año de haber asumido el mando de WHINSEC. ¿Sus metas y objetivos son los mismos?
Coronel del Ejército de los EE. UU. Robert F. Alvaro, comandante de WHINSEC: Luego de haberme desempeñado como oficial de área extranjera durante 18 años, y de haber trabajado en toda América, tengo idea de lo que intentamos lograr en el hemisferio. En primer lugar he analizado el entorno: ¿Qué hacemos? ¿Qué nos piden nuestras partes interesadas en Washington D.C.— el Comando Sur de los EE. UU. [SOUTHCOM] y el Comando Norte de los EE. UU. [NORTHCOM]? — ¿Qué debemos hacer para ser relevantes, conocidos y confiables en toda América? Son los tres pilares que sostienen nuestra visión. En cooperación con nuestros líderes, hemos diseñado una nueva visión y dirección para el futuro de WHINSEC, que nos posicionará como el principal instituto de entrenamiento e instrucción en materia de defensa y seguridad de las Américas para militares, desde cadetes hasta coroneles. Es nuestra meta. Para ello, en noviembre [de 2017] hablamos con la junta directiva sobre nuestra visión, a la que acordaron y contribuyeron. De aquí en adelante trabajaremos para concretar esa visión.
Diálogo: ¿Por qué WHINSEC continúa siendo relevante?
Cnel. Alvaro: Por ahora dictamos 15 cursos y llevamos a cabo muchas actividades en el continente americano, por ejemplo intercambios de expertos relevantes a las naciones, así como también a las demandas de nuestros socios en Washington, NORTHCOM, SOUTHCOM, etc. Si impartimos las mismas clases todos los años, es probable que no podamos satisfacer las necesidades de nuestras naciones amigas. Por lo tanto, necesitamos dialogar en forma permanente con nuestras fuerzas amigas para ver qué capacidades de defensa y seguridad necesitan, y actualizar nuestro programa de enseñanza. Así, ofreceremos un programa académico acorde a las demandas de nuestros socios y de las necesidades de nuestros países amigos.
Diálogo: Usted habló de defensa pero la institución solo emplea la palabra seguridad en su título. ¿Por qué?
Cnel. Alvaro: Es solo un nombre, pero nos dedicamos más al área de defensa. No obstante, cabe aclarar que trabajamos en seguridad y defensa porque contamos con autoridades capacitadas para entrenar a fuerzas policiales y militares de todos los servicios, y a civiles que trabajan en los ministerios de Seguridad y Defensa en toda la región. Entendemos que algunos países abordan seguridad y defensa por separado, como en el Cono Sur, donde no les gusta mezclar ambas áreas; pero algunos países, por necesidad, tienen que trabajar seguridad y defensa en forma conjunta. Nosotros comprendemos las sensibilidades y trabajamos para ayudar a nuestras naciones amigas tanto en seguridad como en defensa.
Diálogo: ¿Qué tan difícil es administrar un programa tan grande que incluye una gama amplia de temas como logística conjunta, interagencia, legislación, ingeniería, inteligencia, planificación y derechos humanos?
Cnel. Alvaro: En primer lugar, creo que no es difícil cuando hay buenos líderes que asesoran sobre el futuro de WHINSEC mediante la junta de visitantes, que incluye a los comandantes de SOUTHCOM y NORTHCOM. Nuestra supervisión es muy eficiente, lo que puede ayudarnos a impulsar el futuro de la institución. En segundo lugar, tenemos excelentes líderes americanos, elegidos por sus fuerzas armadas o ministros de Defensa o de Seguridad, para ser asignados a WHINSEC. Son los mejores candidatos de sus respectivos países, sus futuros generales. Estoy rodeado de grandes talentos. Me asesoran los mejores especialistas, así como el Congreso. Nuestra situación es privilegiada. Hace dos años el mejor instructor del ejército fue un chileno, porque egresó de WHINSEC. El año pasado [2017], el mejor oficial instructor del ejército fue un salvadoreño, porque egresó de WHINSEC. Este año [2018], el mejor educador del Ejército de los EE. UU. es brasileño, también egresado de WHINSEC. Entonces creo que es importante demostrar que tenemos un buen programa educativo por el cual nuestros instructores de países amigos son entrenados en doctrina estadounidense: aprenden la doctrina y luego atraviesan un proceso en el que aprenden a ser instructores al mismo nivel que el resto del Ejército de los EE. UU., para que sean competitivos. Y podemos ver los resultados durante tres años consecutivos. Ese es el tipo de talentos que tenemos. Todos nuestros cursos están validados a través del Comando de Entrenamiento y Doctrina del Ejército de los EE. UU. Cumplimos con todos los criterios de acreditación. No armamos algo de la nada. También contamos con acreditaciones de la ONU o de nuestras operaciones de pacificación. De hecho, acabamos de terminar las inspecciones y nos dieron luz verde, nos dijeron que nuestra acreditación era válida para los próximos tres años. También trabajamos con universidades como Troy y Emory, entre otras. Somos una de las tres organizaciones del Ejército de los EE. UU. que otorgan títulos de maestría. Así, no es tan difícil.
Diálogo: Casi el 10 por ciento del cuerpo estudiantil de WHINSEC está conformado por mujeres. ¿Qué hace para mejorar la situación de igualdad de género en la institución?
Cnel. Alvaro: Muchas cosas. Cumplimos con las leyes de integración de género de los EE. UU.; tenemos seminarios en la materia. En el último seminario que hicimos incluimos mujeres combatientes para hablar de cómo habían llevado a cabo roles de combate en Afganistán e Irak como líderes. También llevamos a cabo seminarios en los cuales hemos invitado a mujeres de toda América para hablar. Hemos realizado paneles académicos abiertos a través de nuestras redes sociales, con el objetivo de que nuestros países amigos de América puedan ver lo que hacemos en WHINSEC. Participan muchas mujeres. En el último que hicimos, de mujeres en paz y seguridad, 6000 personas vieron el evento por Internet. Además motivamos a nuestros países amigos a que envíen estudiantes e instructores a WHINSEC, por supuesto mujeres. De hecho, si consideramos el cuerpo docente y el personal, el 25 por ciento de los integrantes de WHINSEC son mujeres.
Diálogo: ¿Por qué es tan importante para ustedes estar cerca de la academia de suboficiales?
Cnel. Alvaro: WHINSEC tiene cuatro escuelas, una de las cuales es la academia de suboficiales que cuenta con la dirección de mi sargento mayor. Es en apoyo directo de los fundamentos de SOUTHCOM para el profesionalismo y el desarrollo de suboficiales. Esos cuatro requerimientos, en esencia, sirven para la profesionalización de las fuerzas armadas en América. Algunos de ellos son mejores que otros, pero todos podemos recurrir a las mejores fuerzas armadas del mundo en la actualidad, por ejemplo las de los Estados Unidos. Ellos lo saben y se benefician con nuestra experiencia. La formación de cuerpos de suboficiales es un área en la cual la mayoría de las fuerzas armadas de América puede recibir ayuda. Trabajamos para aumentar nuestra capacidad de entrenamiento de suboficiales. Organizamos eventos y seminarios [en la región] para contribuir a la profesionalización, además de trabajar en conjunto con SOUTHCOM y otros servicios para incrementar el profesionalismo de suboficiales. Es un excelente programa. El curso básico para nuestros nuevos suboficiales y sargentos (E5s y E4s) cuenta con la certificación de soldados del Ejército de los EE. UU. Ahora un soldado estadounidense puede asistir a una escuela común del Ejército de los EE. UU. o a WHINSEC. Si van a WHINSEC, reciben el mismo diploma que si fueran a la academia del Ejército, sin diferencia alguna. La única diferencia es que aquí en WHINSEC hay un entorno interagencial multinacional que provee un nivel de conocimiento y experiencia para compartir con todos los suboficiales en América, y lo hacemos en español. Tienen que aprender español. Ese es el idioma que utilizamos con nuestras naciones amigas. Pero se trata del mismo curso que impartimos a nuestros propios soldados estadounidenses.
Diálogo: ¿Qué le diría a los detractores o críticos que dicen que los oficiales y suboficiales en WHINSEC reciben adoctrinamiento de las fuerzas armadas estadounidenses?
Cnel. Alvaro: No lo sé, no sabía que hubiera detractores. Todos los países que vienen quieren aprender de las mejores fuerzas armadas del mundo, de las más resistentes, de aquellas con mayor capacidad de combate y experiencia, listas para adaptarse a cualquier terreno. Así son las fuerzas armadas estadounidenses. No hay otras fuerzas militares en el mundo que tengan nuestra experiencia. Además, somos las mejor entrenadas del mundo, y para ellos es beneficioso tener la oportunidad de estar aquí. No tengo entendido de que haya detractores.
Diálogo: Me refiero a los países que no envían a sus estudiantes a esta institución.
Cnel. Alvaro: Es porque no los invitamos. No los invitamos porque intentamos profesionalizar a las fuerzas de seguridad y defensa que tengan los mismos valores que nosotros. Valores de principios democráticos, derechos humanos y subordinación de fuerzas militares y autoridades civiles. Los socios invitados ayudan a fijar un punto de referencia en materia de seguridad y defensa y así avanzar en forma económica y mitigar la pobreza. Pero se necesita un punto de referencia para que haya progreso. Vamos a ayudar a los países para que obtengan los valores, que los comprendan. No vamos a compartir nuestras técnicas, doctrina, ni a formar a fuerzas armadas que no compartan nuestros valores, ya que podrían emplear esas capacidades para oprimir a sus propios pueblos. Por eso no los invitamos.
Diálogo: ¿Qué falta para que WHINSEC llegue al siguiente nivel? ¿Y cuál es el siguiente paso?
Cnel. Alvaro: El siguiente paso es que se convierta en el principal instituto de entrenamiento y formación en defensa y seguridad de toda América. Ese es nuestro objetivo. Y lo lograremos si somos reconocidos, relevantes y confiables. En primer lugar, podemos hacer que nos reconozcan de diversas maneras. Por ejemplo, nuestra página de Internet está dentro de la página de Fort Benning, solo en inglés. Hemos recibido financiamiento y autorización para tener nuestra propia página web en inglés y español, lo que permitirá a los estudiantes o cualquier interesado saber sobre WHINSEC a través de una página bilingüe. Además, transmitiremos nuestros paneles académicos, algo que ya hacemos en vivo a través de dos canales, en español y en inglés. Así, nuestros países amigos de América y nuestras instituciones hermanas pueden participar en los paneles y hacer preguntas a los oradores, al igual que lo hicimos para las mujeres del sector seguridad.
En segundo lugar, para ser relevantes trabajaremos con nuestras naciones amigas para conocer sus necesidades y capacidades; que puedan hacerse cargo de sus amenazas y trabajar en cooperación con el resto de los amigos de la región para enfrentar a las redes transnacionales y proporcionar soluciones regionales a problemas regionales. WHINSEC puede brindar su apoyo en ese esfuerzo en cooperación con los países amigos. También podemos ser receptivos ante nuestro Consejo de Visitantes y a los requerimientos de Washington para promover los intereses de los EE. UU. En definitiva, es un equilibrio entre lo que necesita la región y lo que piden nuestros socios, para desarrollar un programa académico que nos ayude a continuar siendo relevantes y a transformar WHINSEC en lo que debe ser. Una de las cosas que transformamos es la participación de elementos del orden público en WHINSEC. Ahora un 25 por ciento de los alumnos pertenecen al sector del orden público, pero podemos incrementarlo. No significa perder nuestra identidad como institución militar. La mayoría de las amenazas en el continente americano son responsabilidad del orden público y la policía. Ellos constituyen el principal esfuerzo para abordar las amenazas en América. Tratamos de ser receptivos y relevantes al esfuerzo principal y trabajamos con el Departamento de Estado de los EE. UU. y las embajadas, para que el programa también beneficie al sector del orden público en América. También vamos a trabajar con los departamentos estadounidenses de Seguridad Nacional, de Investigaciones de Seguridad Nacional y de Patrulla Fronteriza para tener un programa que proporcione capacidades a quienes luchan a diario contra las amenazas. Eso es lo que hacemos para subir de nivel.
Y para ser confiables vamos a ser más transparentes que nunca. Transmitiremos nuestras graduaciones en vivo; nuestros compañeros podrán ver los paneles y debates académicos que realizamos y mostraremos nuestras publicaciones. Tratamos de abrir las puertas un poco más, de lograr mayor transparencia. Creo que los detractores a los que usted se refiere –a quienes todavía no conozco– pueden ver lo que hacemos. Hemos recibido a un público diverso, como por ejemplo agregados en Washington, comandantes de ejército, comandantes de las fuerzas armadas. Pueden ver con claridad lo que hacemos y aportar su granito de arena y manifestar qué ayuda necesitan de WHINSEC. Tenemos mucho trabajo por delante; pero para avanzar necesitamos asegurarnos de que nos conozcan, de que lo que hacemos sea relevante y de que confíen en nosotros. Muchos no nos conocen todavía, o no saben de los cursos que impartimos. Por lo tanto, tenemos que educar no solo a nuestros aliados, sino también a nuestro propio pueblo en los Estados Unidos para promover los objetivos del Gobierno estadounidense. Hay muchas embajadas que no saben bien lo que ofrecemos. Si cultivamos los tres aspectos de ser relevantes, confiables y reconocidos, creo que podemos llevar a WHINSEC al siguiente nivel y lograr nuestro objetivo de ser la principal institución educativa de entrenamiento en América.