Tras la orden del Kremlin de una operación militar en Ucrania, “la gran maquinaria de injerencias” del presidente ruso Vladimir Putin se puso a trabajar a marchas forzadas, para mover a la opinión pública mundial en contra de Ucrania, los Estados Unidos y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), indicó el diario español ABC el 25 de febrero.
“El complejo entramado de portavoces, propaganda estatal, medios afiliados dentro y fuera de Rusia, columnistas (…) trabaja a pleno rendimiento, afirmando (…) que Moscú está en su derecho de invadir Ucrania, y que sería pasto del neonazismo si no fuera por la intervención”, agregó ABC.
La narrativa “nazi” es parte integral de la campaña de desinformación de Rusia, para justificar la invasión. Putin junto con sus principales funcionarios y la prensa estatal controlada promueven la falsa narrativa de que Ucrania está “ocupada por nazis” desde la toma de Crimea, refirió Voz de América, el 26 de febrero.
“Caricaturescamente desquiciada”
La comunidad de desacreditación y verificación “somos testigos que la desinformación pro-Kremlin se ha vuelto cada vez más separada de la realidad, y a veces caricaturescamente desquiciada”, dice EuvsDisinfo, una plataforma europea que promueve la concienciación pública y pone de manisfiesto las operaciones de desinformación del Kremlin.
Por ejemplo, los medios pro-Kremlin informaron que las Fuerzas Armadas de Ucrania supuestamente se infiltraron en territorio ruso con equipo que no poseen, afirmaron que el Ejército ucraniano bombardeó un jardín de niños ubicado en su propio territorio, y realizaron “acusaciones espantosas y completamente inventadas de genocidio en Dondas”.
Otras narrativas falsas empleadas por los desinformadores rusos fue crear historias de que los EE. UU., el Reino Unido y Canadá, emplean a Ucrania como ariete contra Rusia; y presentan a la OTAN como agresor y a Rusia como víctima, destacó EUvsDisinfo.
Un informe del 20 de enero del Gobierno de los EE. UU. señala que los medios rusos estatales de comunicación Russia Today (RT) y Sputnik, son elementos críticos en el ecosistema de desinformación y propaganda de Rusia. Agrega que un ejemplo es el uso constante de estas plataformas para intentar cambiar las opiniones públicas sobre Ucrania, los EE. UU. y Latinoamérica.
También señala los cinco temas principales de desinformación que el Kremlin reajusta constantemente para llenar el entorno de información con narraciones falsas: Presentar a Rusia como una víctima inocente; negar o distorsionar eventos históricos; promover el falso colapso de la civilización occidental; acusar falsamente a los EE. UU. de promover “revoluciones de color”; y crear múltiples realidades falsas de lo que el Kremlin quiere que suceda.
Regímenes no democráticos
El uso de campañas de desinformación patrocinados por el Estado son parte de la estrategia de los regímenes no democráticos, dice Global Americans, un grupo de investigadores sobre Latinoamérica y el Caribe, con sede en Washington D.C.
También asegura que Rusia y China son muy activos en promoción de información falsa, desinformación y propaganda en Latinoamérica, a través de sus canales de medios estales como RT, Telesur, Sputnik Mundo y Xinhua Español.
La información falsa, la desinformación y la propaganda rusa y china, están desproporcionadamente concentradas en temas que se encuentran en la intersección de las líneas de falla democrática, avivando la ruptura política local, promoviendo fuerzas locales no democráticas con ideologías similares, y mostrando a Rusia y a China como socios benevolentes y alternativos a los EE. UU. en toda la región, abunda Global Americans.
La estrategia de desinformación rusa se enfoca en alterar el orden social y la estabilidad política. El Kremlin también busca ganar nuevos amigos que, de preferencia, no tiendan hacia los EE. UU., con la esperanza de expandir su influencia política, refiere Global Americans.
De modo que el uso del idioma español en la estrategia de desinformación y propaganda rusa es crucial, pues es la llave a una audiencia mundial de casi 600 millones de personas, detalló el diario español ABC. “El Kremlin miente con la misma naturalidad con la que respira”, dijo Nicolás de Pedro, investigador del Institute for StateCraft de Londres, un centro de estudios pro-democracia, al canal de televisión español Antena3 el 24 de febrero.
Otros jugadores
“Sabemos que otros jugadores intentan usar la misma técnica, pero muy a menudo la desinformación y estas operaciones híbridas son muy abiertas y no puedes verlas”, manifestó Ruslan Deynychenko, director de la organización ucraniana de comprobación de hechos StopFake a la cadena de televisión estadounidense CBS News, el 17 de febrero.
StopFake ha pasado cerca de 8 años desacreditando la desinformación rusa difundida por medios estatales y privados y ejércitos de troles en Internet a través de redes sociales no oficiales, precisó CBS News.
Además, la invasión de Ucrania se perfila como el primer gran conflicto armado de Europa en la era de las redes sociales, lo que conlleva el peligro de una difusión instantánea de desinformación peligrosa, incluso mortal, señaló AP el 25 de febrero.