Meta, matriz de Facebook, advirtió de la amenaza creciente de desinformación e injerencia en el 2024 ante la celebración de elecciones claves como las elecciones presidenciales estadounidenses. Los ataques, mediante la inteligencia artificial, vendrían de China, Irán y Rusia. Como medida preventiva, en diciembre, eliminó 4789 cuentas de Facebook en China, dirigidas contra los EE. UU.
Las cuentas falsas utilizaban fotografías y nombre copiados de internet, para comentar en redes e iniciar amistad con cuentas de otras partes del mundo “haciéndose pasar por estadounidenses”, indicó el Informe de amenazas adversarias, divulgado por Meta el 30 de noviembre.
“Hay varios métodos que China, Rusia e Irán usan en conjunto para socavar la democracia en el mundo; uno de ellos es la guerra informática”, dijo el 4 de enero a Diálogo Douglas Farah, presidente de IBI Consultants, una firma estadounidense que monitorea desarrollos políticos y de seguridad en el hemisferio. “Este concepto está en la doctrina militar de Rusia y China de manera explícita; engloba tanto los esfuerzos de desinformación como de guerra cibernética”.
“Las cuentas eliminadas hacían publicaciones en múltiples plataformas, pero Meta cerró la red antes de que pudiera lograr la participación de comunidades auténticas en nuestras aplicaciones”, informó la revista Forbes. Meta agregó que no está claro si el objetivo era generar tensiones partidistas, crear audiencias entre los partidarios de estos políticos, hacer que las cuentas falsas que comparten contenido auténtico parezcan más genuinas, o todo lo anterior.
La empresa matriz de Facebook también cerró otras dos redes de menor tamaño: una de origen chino con 13 cuentas falsas y siete grupos que apuntaban a India y el Tíbet, haciéndose pasar por periodistas y activistas, además de una red rusa que tenía seis cuentas de Facebook, una página y tres cuentas de Instagram dirigidas a audiencias de habla inglesa en todo el mundo.
“Rusia continúa siendo la fuente geográfica más prolífica de comportamientos coordinados no auténticos, siguiendo la senda de los pasados años y sobre todo desde su invasión a Ucrania, con el objetivo primordial de erosionar el apoyo internacional al país vecino”, expuso Meta en el reporte. “Mientras que China es una fuente creciente de influencia encubierta y de campañas de desinformación, lo que podría incrementarse por los avances en inteligencia artificial”.
“Lo que estamos viendo en la actualidad es un fuerte empuje de China y Rusia –pero especialmente de Rusia–, para dirigir granjas de troles con la capacidad de inundar cualquier lugar con desinformación e información falsa”, dijo Farah. “Ellos están especialmente enfocados en negar que la democracia liberal tradicional es un modelo exitoso en el mundo”.
“Rusia sigue siendo la mayor fuente de lo que Meta denomina campañas coordinadas de ‘comportamiento no auténtico’ en las redes sociales, con esfuerzos centrados en influir a la opinión pública sobre la guerra rusa en Ucrania”, indicó Forbes. Sin embargo, la influencia de China en campañas de polarización y desinformación también crece, remarcó Meta.
En agosto de 2023, Meta eliminó unas 7500 cuentas de Facebook vinculadas a grupos de influencia chinos, que promocionaban contenido propagandístico a través de una red denominada Spamouflage, que se dirigía a usuarios de todo el planeta, reportó el portal Campaign Asia. El objetivo de la red era difundir comentarios positivos sobre China, críticas a las políticas exteriores de los EE. UU. y occidente y atacar a los críticos del régimen chino, incluyendo a periodistas e investigadores.
“Pero lo que China, Irán y Rusia quieren en nuestra región es socavar el concepto de democracia y favorecer el modelo bolivariano”, dijo Farah. “Eso implica desmantelar las estructuras tradicionales que los EE. UU. apoyan desde la Guerra Fría, que van desde la democracia representativa a las elecciones limpias, entre otros”.
Esos esfuerzos de potencias globales tienen su correlato en las acciones de las dictaduras latinoamericanas.
“Si uno nota, todas las dictaduras en Latinoamérica como Cuba, Nicaragua y Venezuela, cortan todo acceso a la información que debería de ser pública, tales como presupuestos militares y ayuda de los Estados Unidos”, aseguró Farah. “El objetivo es poder aumentar la corrupción”.
En noviembre de 2023, el Departamento de Estado de los EE. UU. alertó que Moscú financia una campaña desinformativa en Latinoamérica, aprovechando contactos entablados con medios de comunicación en Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Cuba, México, Venezuela, Brasil, Ecuador, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay, entre otros países, para impulsar una campaña de manipulación informativa.
El objetivo final es blanquear sus esfuerzos de propaganda y desinformación a través de los medios locales, de modo que resulte natural a las audiencias locales, para socavar el apoyo a Ucrania y propagar una mentalidad contraria a los EE. UU. y a la OTAN, informó el Departamento estadounidense.
“Rusia impulsa el mensaje en toda la región de que ellos están bajo ataque de los EE. UU. y de la OTAN, y que ello justifica el posicionamiento mucho más fuerte de Rusia en el hemisferio occidental, con proyección desde Venezuela, Nicaragua, y Argentina”, dijo Farah. “Rusia dice, ‘bueno, si los EE. UU. y OTAN está en nuestras fronteras, en nuestro patio trasero, tenemos la necesidad estratégica de estar en el suyo’”.
En Nicaragua, el régimen de Daniel Ortega-Rosario Murillo firmó en 2022 un acuerdo de colaboración con Rusia para reforzar la difusión de información del régimen nicaragüense y los controles para “prevenir, detectar, investigar el uso incorrecto, abusivo y delictivo de las Tecnologías de la Información y la Comunicación”, indicó el canciller de Nicaragua Denis Moncada. Ese acuerdo contempla el entrenamiento de periodistas nicaragüenses en técnicas de propaganda que beneficien al régimen.
Para Irán, Latinoamérica también es foco de sus esfuerzos propagandísticos y de desinformación. La nación persa fundó Hispan TV en 2012 y, desde ahí, despliega sus esfuerzos hacia países hispanoparlantes de todo el mundo. Hispan TV difunde su contenido a través de diversas plataformas; desde retransmisiones satelitales y por cable hasta emisiones en vivo, así como a través de sus plataformas web y redes sociales, asegura el centro de investigación Fundación para la Defensa de las Democracias.
“Con la tecnología que hoy existe es muy fácil montar un medio, controlar un algoritmo y lanzar mensajes donde sea”, finalizó Farah. “Debemos pensar en cambio cómo logramos potenciar medios de comunicación que sean legítimos y cuyas noticias sean verificables”.