Huawei, la empresa de telecomunicaciones china, representa un riesgo muy alto para la democracia en Latinoamérica con su red telefónica de quinta generación (5G), por estar vinculada al Partido Comunista Chino (PCCh), dijo el 11 de junio a Diálogo Euclides Tapia, profesor titular de Relaciones Internacionales en la Universidad de Panamá.
“El asunto es que ellos [Huawei], como cualquier empresa china, tienen la intervención del PCCh quien dice la última palabra; inclusive está estipulado en su Constitución”, precisó Tapia. “El peligro es que cuando China requiere información confidencial o de seguridad de nuestros países, tienen acceso sin ningún tipo de restricción para ello”.
Se estima que para 2025, alrededor del 12 por ciento de las conexiones de Internet móvil en Latinoamérica sean mediante la tecnología 5G. Sin embargo, una meta más optimista es que las mayores economías de la región como Brasil y México, podrá alcanzar el 20 por ciento de conectividad para esa misma fecha, refiere en Internet la plataforma alemana de estudios de mercado Statista.
Los gobiernos son clave en este camino. “Existen dos razones por la que ellos [los Estados] están accediendo a los servicios de Huawei 5G”, comentó Tapia. “Una es el costo bajo, pero desafortunadamente con muy baja seguridad, y la otra es la velocidad en que se están dando los cambios a nivel tecnológico en el mundo”.
El problema de estos acuerdos es que se convierten en acuerdos permanentes, precisó Tapia. “Ahí esta el peligro, porque no hay una legislación que permita revertir lo que se pacte con algunos gobiernos que tienen una alianza ideológica con China en Latinoamérica”, detalló.
Visión democrática
La preocupación de las autoridades estadounidenses por los equipos de Huawei remontan en el tiempo. En 2012, el Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes de los EE. UU. advirtió en un extenso informe que los equipos de telecomunicaciones de Huawei podrían utilizarse para espiar en los Estados Unidos e instó a las empresas a no hacer negocios con Huawei. En 2017, las agencias de inteligencia estadounidenses determinaron que los equipos de Huawei podían interrumpir las comunicaciones altamente restringidas del Departamento de Defensa de los EE. UU., incluidas las relativas al arsenal nuclear estadounidense, informó la CNN.
Desde entonces, la empresa china ha sido efectivamente prohibida en Estados Unidos por representar un riesgo para la seguridad nacional. Otros países siguieron su ejemplo, entre ellos Australia, Canadá y el Reino Unido.
Además, luego que Huawei fuera sorprendida robando secretos comerciales, evadiendo las prohibiciones de los EE. UU. para la transferencia de tecnología a Irán, y las sospechas de ser un brazo de los servicios de inteligencia chinos, los EE. UU. impusieron una serie de controles, indicó la plataforma Voz de América (VOA).
Desde 2019, esas fiscalizaciones cortaron el suministro de chips de empresas estadounidense a Huawei, su acceso a tecnología estadounidense para diseñar sus propios chips y hacer que sus socios los fabriquen, precisó. En este contexto, los EE. UU. advirtieron a sus países amigos por todo el mundo y en Latinoamérica no adoptar la tecnología de 5G de Huawei por considerarla insegura, reporta en Internet la plataforma alemana DW.
“Las empresas chinas, en este caso Huawei, son empresas que dentro de su marco filosófico y su creación no tienen el resguardo de los datos de los ciudadanos; por tanto no son empresas confiables”, dijo a DW Gastón Massari, presidente de la ONG argentina Gobernanza, que apoya a los países para que fortalezcan su democracia con tecnología.
“Si hay otras opciones 5G [otras que Huawei], aunque sean más caras, podrán [los ciudadanos y los gobiernos] sortear el peligro de ser espiados por China”, precisó Tapia.
Nuevo bloqueo
Hasta la fecha, 10 países europeos también han prohibido o restringido la presencia de Huawei en sus redes 5G, informó CNBC. A principios de junio, el Comisario de Mercado Interior de la UE, Thierry Breton, instó a más Estados miembros a retirar a Huawei y a otros proveedores de alto riesgo de sus redes 5G.
A finales de mayo, Portugal se convirtió en una de las últimas naciones en bloquear la tecnología de Huawei de su mercado, informó Bloomberg, y Alemania está considerando hacer lo mismo.
“Huawei 5G no es una buena opción para la región latinoamericana”, abundó Tapia.
La 5G será la interconectividad de todos los sistemas y entornos tecnológicos, incluso los estratégicos como el control de misiles o las plantas nucleares, reportó el medio argentino Visión Desarrollista. Incluso en una sociedad tan dependiente de la infraestructura de telecomunicaciones, un apagón o sabotaje de las redes 5G tendría un impacto tan grande como un corte de suministro eléctrico generalizado.
Por lo que, “los países [latinoamericanos] que están por decidir contratar la Huawei 5G deben tener muy claro el defender el sistema democrático. Si no, van a caer en manos de China, que es contrario al sistema democrático. Quedar en manos de la tecnología china es perder la privacidad”, comentó Tapia. “Además, toda la producción china es barata y de mala calidad”.