A principios de noviembre de 2023, el Gobierno de Brasil lanzó un decreto para la garantía de la ley y el orden (GLO) para reforzar la lucha contra el crimen organizado. El plan incluye el refuerzo y la unión de la Policía Federal; de la Policía de Carreteras y Criminal; y de las Fuerzas Armadas (Ejército, Fuerza Aérea y Marina), para ampliar las operaciones en sus puertos, aeropuertos y fronteras. Las nuevas medidas estarán vigentes hasta mayo de 2024.
“Decidimos tomar una decisión e involucrar activamente al gobierno federal con todo el potencial que tiene, para que podamos ayudar a los gobiernos estatales y ayudar al propio Brasil a liberarse del crimen organizado, las bandas, el narcotráfico y el tráfico de armas”, dijo el presidente Luiz Inácio Lula da Silva durante el lanzamiento.
Los lugares que recibieron las medidas fueron los puertos de Río de Janeiro e Itaguaí en el estado de Río de Janeiro; y el de Santos, el mayor de Latinoamérica, en el estado de São Paulo; además de los aeropuertos internacionales Tom Jobim, en Río de Janeiro y Guarulhos, en el estado de São Paulo.
“La idea inicial es que la Fuerza Aérea proceda, sobre todo en las zonas vulnerables en este momento, donde se transportan equipajes, reforzando las inspecciones de la Agencia de Hacienda, la Policía Federal y las propias compañías aéreas”, dijo a los medios el ministro de Justicia y Seguridad Pública Flávio Dino. “La Marina de Brasil ayudará en la inspección de la carga en los buques, lo que demuestra la importancia de este medio de transporte para las actividades de las organizaciones criminales. El Ejército trabajará en la frontera. Las acciones de todos serán progresivas y sin impedir que la Policía Federal y la Agencia de Hacienda continúen su trabajo”, añadió el ministro.
Las acciones emprendidas por la Marina de Brasil (MB) en el litoral paulista fueron reforzadas por el buque patrullero Gurupi, que llegó al puerto de Santos el 14 de noviembre, para apoyar las vigilancias e inspecciones de embarcaciones en la región. Durante los primeros siete días, el MB realizó 505 abordajes a embarcaciones, con seis incautaciones por irregularidades administrativas, 4368 inspecciones de vehículos, 61 acciones interinstitucionales y 11 inspecciones de cascos de embarcaciones.
El Ejército y la Fuerza Aérea Brasileños (FAB) están intensificando sus acciones a lo largo de la frontera de Brasil con otros países, especialmente en los estados de Mato Grosso, Paraná y Mato Grosso do Sul. Estos dos últimos limitan con Paraguay, por donde entran armas de gran calibre y drogas. El balance de la FAB de los 15 primeros días de la operación informa que fueron registradas 358 personas y 51 vehículos. Las patrullas sumaron 230 horas.
Las medidas también tienen como objetivo atacar el poder financiero de las organizaciones criminales. La Policía Federal ampliará sus actividades y operaciones de inteligencia para detener e incautar bienes pertenecientes a bandas y milicias, especialmente en Río de Janeiro. El Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, junto con el Gobierno del Estado de Río de Janeiro, crearon el Comité Integrado de Investigación Financiera y Recuperación de Activos, destinado a debilitar el poder financiero de las bandas, mediante el apoyo a las investigaciones sobre delitos financieros y blanqueo de dinero. Además de Río, las medidas para asfixiar financieramente a las organizaciones delictivas se centrarán en São Paulo.
Se desplegaron 3700 miembros de las Fuerzas Armadas, 2000 del Ejército, 1100 de la Marina y 600 del Ejército del Aire.