Militares de la Armada Argentina capturaron un buque chino que pescaba ilegalmente dentro de la zona económica exclusiva (ZEE) de Argentina, en medio de la creciente preocupación por la pesca depredadora en el Atlántico Sur.
El 5 de mayo, el Patrullero Oceánico ARA Bouchard monitoreaba los espacios marítimos argentinos, cuando detectó el buque chino Hong Pu 16 realizando pesca ilegal cerca de la ciudad de Puerto Madryn, en la Patagonia. El barco chino, de tipo potero (especializado en la pesca de calamar), tenía el sistema de identificación apagado y las luces de pesca encendidas.
“Ante los reiterados intentos de comunicación por radio y señales luminosas, el buque pesquero inició la navegación en dirección hacia aguas internacionales”, dijo la Armada Argentina en un comunicado. La embarcación china aumentó su velocidad y buscó refugio entre los barcos pesqueros extranjeros estacionados en la milla 201, que marca el inicio de las aguas internacionales.
Los militares entonces iniciaron la persecución del buque infractor según la normativa legal vigente, instándolo a detener su marcha y permitir la visita de inspección. Luego de casi tres horas, el buque chino permitió el embarque de la dotación de visita argentina para constatar el delito.
“El Hong Pu 16 poseía 700 kilos de pescado fresco y 300 toneladas de pescado congelado en sus bodegas”, informó la Armada.
Prefectura Naval
El 28 de abril, el guardacostas GC-27 Prefecto Fique, de la Prefectura Naval Argentina, detectó el buque Lu Rong Yuan Yu 668, también de bandera china, pescando a unos 390 kilómetros mar adentro de Puerto Madryn.
“El buque potero tenía sus luces de faena encendidas, artes de pesca desplegadas y en funcionamiento, por lo que se ejecutó el protocolo de disuasión para que cesara la actividad y pudiera ser inspeccionado”, afirmó la Prefectura Naval en un comunicado.
La tripulación argentina efectuó sucesivas llamadas por radio, además de señales sonoras y visuales, para hacer contacto con el capitán del barco chino. “Sin embargo, el buque apagó las luces de pesca e inició su navegación hacia aguas internacionales”, informó la Prefectura.
Los efectivos lo persiguieron con el apoyo del avión patrullero marítimo PA-22. El barco pesquero continuó navegando mar adentro a pesar de las reiteradas advertencias del guardacostas, que siguió su protocolo basado en la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar.
No obstante, luego de “varias horas de operativo” y en medio de un “temporal muy fuerte de viento y olas”, los efectivos argentinos desistieron de la persecución. “Se decidió dar por finalizada la operación para resguardar la vida de las tripulaciones de ambas embarcaciones”, aclaró la Prefectura. Las autoridades iniciaron un sumario administrativo y judicial por infracción al Régimen Federal de Pesca y por resistencia a la autoridad dentro de la ZEE.
Alerta sobre las flotas chinas
El 25 de abril, Alberto Mendoza, capitán del buque pesquero argentino Don Pedro, publicó un video mostrando 95 barcos extranjeros pescando ilegalmente calamar. “Los buques están operando de manera ilegal en una extensión de 24 millas náuticas de largo por 6 de ancho [44 km por 11]”, dijo Mendoza.
Al día siguiente, la asociación Intercámaras de la Industria Pesquera Argentina, que agrupa a entidades del sector, denunció la pesca depredadora en una nota al presidente de Argentina Alberto Fernández. El documento alerta sobre la grave situación generada por las flotas pesqueras extranjeras, “principalmente asiáticas y fundamentalmente chinas”.