Desde el 2 de septiembre de 2019, 494 playas de 10 estados brasileños fueron afectadas por una mancha de petróleo. El derrame del hidrocarburo afectó unos 2000 kilómetros de playa, en lo que se considera el peor desastre ambiental en las costas brasileñas.
Periodistas y funcionarios gubernamentales confirmaron que, según los análisis efectuados por la empresa petrolera brasileña Petrobras, la mezcla del crudo no era de origen brasileño. “Creemos que el petróleo proviene de Venezuela, como dice el estudio de Petrobras. Parece ser petróleo procedente de un buque extranjero que navegó cerca de las costas de Brasil”, manifestó Ricardo Salles, ministro de Medio Ambiente de Brasil, ante la Comisión de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Cámara de Diputados, el 9 de octubre.
La declaración generó la reacción del régimen de Nicolás Maduro, que negó la responsabilidad de Venezuela en el derrame. “Petróleos de Venezuela (PDVSA) rechaza categóricamente las declaraciones del Ministro del Medio Ambiente de Brasil Ricardo Salles, que acusan a Venezuela de ser responsable del crudo que contamina las playas del noreste de Brasil desde principios de septiembre”, señalaron en un comunicado de prensa el Ministerio del Poder Popular de Petróleo y Minería y la empresa estatal PDVSA.
Según el comunicado, la empresa no recibió reporte alguno de sus clientes o filiales sobre una posible avería o derrame en las cercanías de las costa brasileras. Sostuvo además que sus plataformas se ubican a unos 6650 kilómetros de la región brasileña donde aparecen las manchas de petróleo.
“La evidencia de que el petróleo es de origen venezolano se basa en análisis de laboratorio efectuados por Petrobras. La hipótesis es que pudo haberse derramado desde algún barco que viajó desde Venezuela por la costa brasileña, y no necesariamente de pozos del Gobierno dictatorial venezolano”, respondió Salles en una entrevista con el diario Folha de São Paulo.
Investigaciones
El Gobierno de Brasil está investigando las causas y posible responsabilidad del derrame de petróleo. El Ministerio de Medio Ambiente lidera una fuerza de tarea de investigación en donde participan el Ministerio de Defensa, Petrobras y varias agencias federales y estatales.
El presidente de Petrobras Roberto Castello Branco expresó que consideraban tres hipótesis: el hundimiento de un buque, un accidente durante la transferencia de petróleo entre embarcaciones o un derrame delictivo.
Una de las rutas de la investigación lleva a analizar la información del tráfico mercante a lo largo de la costa noreste. Por lo tanto, la Marina de Brasil (MB) notificó a 30 buques cisterna de 10 países para que enviaran sus aclaraciones al respecto. “La MB está en contacto con las autoridades competentes de los países de origen de los buques, con la Organización Marítima Internacional y con la Policía Federal, para aclarar los hechos”, indicó la MB.
Hasta el 7 de noviembre, la MB informó que ya fueron recogidas 4300 toneladas de petróleo y desechos derivados en playas del noreste. Cientos de voluntarios y organizaciones civiles participan en la campaña de limpieza de las costas. También hay equipos de la MB en el lugar, en donde trabajan 1600 militares, cinco buques y una aeronave, así como embarcaciones y vehículos de capitanías de puertos, delegaciones de policía y agencias costeras.