Rusia ha realizado pruebas de un misil antisatélite de ascenso directo (DA-ASAT en inglés). “Rusia afirma públicamente que está trabajando para evitar la transformación del espacio exterior en el campo de batalla, pero al mismo tiempo Moscú continúa enviando armas al espacio, mediante el desarrollo y el despliegue de capacidades en órbita y terrestres, que buscan aprovecharse de la dependencia de los EE. UU. en sistemas basados en tecnología espacial”, expresó el General del Ejército de los EE. UU. James Dickinson, jefe del Comando Espacial de los EE. UU.
“Las persistentes pruebas rusas de estos sistemas demuestran que las amenazas a los sistemas espaciales estadounidenses y países socios están avanzando rápidamente. No podría haber sido más oportuna la creación del Comando Espacial de los EE. UU., como comando de combate unificado de la nación para el espacio y de la Fuerza Espacial de los EE. UU., como rama principal de las Fuerzas Armadas de los EE. UU., que ofrece capacidades de apoyo de combate y combate espacial al Comando Espacial de los EE. UU. Estamos listos y comprometidos para disuadir la agresión y defender a nuestra nación y a nuestros aliados, de actos hostiles en el espacio.”
“Las persistentes pruebas rusas de estos sistemas demuestran que las amenazas a los sistemas espaciales estadounidenses y países socios están avanzando rápidamente. No podría haber sido más oportuna la creación del Comando Espacial de los EE. UU., como comando de combate unificado de la nación para el espacio y de la Fuerza Espacial de los EE. UU., como rama principal de las Fuerzas Armadas de los EE. UU., que ofrece capacidades de apoyo de combate y combate espacial al Comando Espacial de los EE. UU. Estamos listos y comprometidos para disuadir la agresión y defender a nuestra nación y a nuestros aliados, de actos hostiles en el espacio”, General del Ejército de los EE. UU. James Dickinson, jefe del Comando Espacial de los EE. UU.
A EE. UU. le preocupa el desarrollo y el despliegue continuo de Rusia de diversos tipos de armas ASAT terrestres y espaciales. Estas medidas son contrarias a la postura diplomática y pública de Rusia contra la militarización del espacio. En particular, Rusia ha probado dos tipos de armas espaciales completamente diferentes.
El primer tipo de arma cinética es un sistema DA-ASAT, capaz de destruir satélites en la órbita terrestre baja, que se ha puesta a prueba en varias oportunidades. Si esta arma se prueba en un satélite real o se emplea operativamente, causará un gran campo de desechos que podría poner en peligro a satélites comerciales y contaminar irreversiblemente el dominio espacial.
El segundo tipo es un ASAT coorbital, un sistema armamentístico basado en tecnología espacial, que realizó demostraciones con un arma cinética en órbita en 2017, y nuevamente en 2020. Además, en marzo de 2018, el presidente Putin anunció el desarrollo de un sistema láser terrestre para uso de las Fuerzas Espaciales Rusas, que el ejército ruso reconoció como un “sistema láser de combate”. Este patrón de conducta se consideraría potencialmente amenazador en cualquier otro dominio.
“Rusia ha convertido al espacio en un dominio de guerra, debido a las pruebas de armas espaciales y terrestres destinadas a detectar y destruir satélites”, agregó el Gral. Dickinson. “Este hecho es inconsistente con las afirmaciones públicas de Moscú de que Rusia busca prevenir conflictos en el espacio. El espacio es fundamental para todas las naciones. Es un interés compartido crear las condiciones para un entorno espacial seguro, estable y operacionalmente sostenible. Las demandas sobre sistemas espaciales continúan en este momento de crisis, donde la logística, el transporte y las comunicaciones globales son claves para derrotar la pandemia de COVID-19.”