El 2 de octubre de 2021, las fuerzas navales de ocho países participaron en un desembarco anfibio multinacional, que se llevó a cabo durante la fase anfibia del ejercicio UNITAS LXII.
UNITAS está diseñado para el entrenamiento de fuerzas en operaciones marítimas conjuntas, y para aumentar la interoperabilidad y las capacidades de las fuerzas navales y de infantería de marina que participan en el evento. Este ejercicio ayuda a desarrollar y fortalecer las relaciones que benefician las capacidades de socios marítimos, para alcanzar objetivos en común.
El desembarco anfibio estuvo a cargo del Capitán de Navío de la Marina de Guerra del Perú Eduardo Díaz León, quien se desempeñó como comandante de la fuerza multinacional de desembarco combinado, bajo el mando general del Contraalmirante de la Marina de Guerra del Perú Oscar Torrico Infantas, comandante de la Fuerza de Tarea Combinada 401. En el desembarco participaron nueve buques anfibios, seis aeronaves de ala fija, cinco helicópteros, 20 vehículos blindados ligeros, nueve botes pequeños, dos lanchas de desembarco con amortiguación de aire, dos lanchas de desembarco utilitarias y cinco vehículos de apoyo en tierra, llevados a la costa mediante lanchas de desembarco clase Ship-to-Shore Connector.
Algunas de las actividades principales de la jornada fueron la incursión aérea de operadores especiales de la aeronave Fokker F60 de la Marina del Perú, bombardeos con aeronaves Mirage 2000 de la Fuerza Aérea del Perú, salto de nadadores de combate de naciones socias desde helicópteros UH-1 Huey de los EE. UU., y el desplazamiento de navío-a-tierra, con aproximadamente 200 militares de distintas naciones en 23 embarcaciones diferentes.
“Hoy nuestras fuerzas multinacionales, tanto navales como de infantería de marina, trabajaron de forma integrada con recursos aéreos, terrestres y marítimos, para realizar un desembarco anfibio en UNITAS”, manifestó el Contraalmirante Jim Aiken, comandante de Fuerzas Navales del Comando Sur de los EE. UU. “Esta integración muestra la verdadera unidad y colaboración que fortalecerán nuestros lazos y entrenamientos en los próximos años”.
Durante la fase Pacífico, que se llevó a cabo luego de la ceremonia de apertura el 27 de septiembre, las embarcaciones realizaron maniobras y coordinaciones en mar abierto, para neutralizar y derrotar a un enemigo según un determinado escenario. La Marina estableció condiciones en el Pacífico para facilitar el desembarco anfibio en tierra, con el objetivo de afianzarse en el terreno, asegurar el objetivo, y realizar maniobras de seguimiento en apoyo del escenario del ejercicio. El escenario se desarrolla en función a eventos y brinda a la fuerza multinacional oportunidades de mejora en materia de interoperabilidad, dentro de un entorno complejo e incierto.
La integración naval entre la marina y el cuerpo de infantería de marina es un aspecto crítico en las operaciones marítimas conjuntas, lo cual facilita el empleo seguro y eficaz de tropas y sistemas armamentísticos. El dominio marítimo incluye también los litorales, que incorporan no solo el océano sino también el área interior desde la costa, a la cual se puede apoyar y defender directamente desde el mar.
En este desembarco anfibio Perú coordinó las maniobras de fuego en toda la fuerza multinacional, para asegurarse de que los tiempos y la secuenciación de las maniobras se llevaran a cabo de forma segura y realista, con el fin de mejorar la preparación y fortalecer las asociaciones entre las naciones participantes.
“El ejercicio UNITAS demuestra la cohesión, la coordinación y la voluntad de los diferentes países que participan”, expresó el Cap. de Nav. Díaz. “Esta operación muestra la cooperación y coordinación que existe entre todos los países, con la finalidad de estar preparados para enfrentar cualquier amenaza que atente contra la seguridad y estabilidad de los países de esta región”.
El presidente peruano Pedro Castillo presenció junto a otros líderes claves del Gobierno, del Ejército y de países socios, el desembarco anfibio de UNITAS LXII. El ejercicio de este año también coincide con el bicentenario del Perú, un hito histórico que conmemora los 200 años de la independencia del país y el nacimiento de su Marina.