En su primer día como comandante del buque Patrullero Costero ARC José María Palas (PM-103), de la Fuerza Naval del Pacifico de la Armada de Colombia, el primero de febrero de 2020, la Teniente de Navío Yerliza Rodríguez coordinó una interdicción marítima.
Tras recibir información de inteligencia, la Tte. de Nav. Rodríguez activó una operación en la desembocadura del Río Naya, en el departamento de Valle del Cauca, que terminó con la intercepción de un navío, el decomiso de una tonelada de clorhidrato de cocaína, 500 galones de combustible y la captura de tres miembros del Grupo Armando Residual E30, conformado por exintegrantes de las FARC.
“Soy parte de la solución; estoy del lado del pensamiento positivo. Creo de manera firme que solo actuando correctamente logramos los objetivos”, dijo a Diálogo La Tte. de Nav. Rodríguez, primera mujer de la Armada colombiana designada como comandante de una lancha patrullera en el Pacífico. Esta misión evitó que USD 33 millones ingresaran a la estructura delincuencial, aseguró a la prensa la Armada.

Cinco días después, la Tte. de Nav. Rodríguez y los 22 tripulantes a bordo de la PM-103, incautaron en el Pacífico 200 kilogramos de marihuana. “La lucha es frenética” –agregó–, “nunca nos detenemos, las operaciones contra el narcotráfico son constantes”.
En 2008, Yerliza Rodríguez, con apenas 15 años, entró a la Escuela Naval de Cadetes Almirante Padilla. Fue un esfuerzo muy grande por parte de su familia, oriunda de Quibdó, departamento del Chocó, región caracterizada por sus precarias condiciones de vida, extrema inseguridad y grupos delincuenciales que azotan a la comunidad.
“En 2011, me gradué como Profesional en Ciencias Navales, para formar parte de los 35 000 militares que conforman la Armada de Colombia”, contó la Tte. de Nav. Rodríguez. “Ahora soy parte de las fuerzas que combaten los males de mi región”. Después de 13 años de servicio, asegura que fue su mejor decisión.
Relata que su género no interviene en su formación. “No me tratan mejor o peor por ser mujer”, asegura la Tte. de Nav. Rodríguez. “Nos entrenan y nos exigen a fondo, esperan de nosotras lo mismo que de los hombres. En la inclusión las fuerzas militares avanzan mucho”.
La Armada cuenta con 1078 mujeres. “Esto tiene que ver con los adelantos que tenemos para vincular a las mujeres de línea”, explicó el Contralmirante de la Armada de Colombia John Fabio Giraldo, comandante de la Fuerza Naval del Pacifico. “Adelantamos un proceso interno encaminado a abrir espacios para ellas en cargos de mando de operaciones especiales, con muy buenos resultados”.
Destacarse en cada etapa de su carrera prepara a la Tte. de Nav. Rodríguez para su participación en misiones de importancia. Entre 2018 y 2019 fue desplegada en la 5.a expedición científica de Colombia a la Antártida, asignada como apoyo logístico para el desarrollo de proyectos de investigación, a bordo del buque ARC 20 de julio (PZE-46).
La Tte. de Nav. Rodríguez forma parte de un proceso de apertura que comenzó en 1984 cuando entraron a la Armada las primeras mujeres. “Cada misión en la que participo me ayuda a configurar una visión más amplia de la responsabilidad en la que estoy comprometida con mi país”, aseguró.
Con la inclusión cada vez más activa, la Armada de Colombia avanza en la consolidación para alcanzar una fuerza integral, con mujeres que tendrán un protagonismo determinante en las fuerzas armadas del futuro. “Es un trabajo en equipo, porque yo nada haría con tener toda la energía y la disposición si mi tripulación no estuviera cohesionada”, finalizó la Tte. de Nav. Rodríguez.