La Marina de Brasil (MB) realizó el 20 de agosto de 2019 un operativo de limpieza en la playa de Icaraí, a 20 kilómetros de Río de Janeiro, en donde participaron militares voluntarios de los EE. UU. a bordo del USS Carter Hall. En el evento participaron alrededor de 100 militares, 20 de los cuales eran de los EE. UU. La MB dijo que más de 8 millones de toneladas de basura terminarán cada año en las aguas del planeta; casi el 90 por ciento serán desechos plásticos de distintos tipos.
“Es una campaña cívico-social de concientización para la preservación ambiental. La Marina apoya todas las medidas relacionadas con la preservación del medio ambiente marino y con el Plan Nacional para Combatir los Desechos Marinos, del Ministerio de Medio Ambiente”, dijo el Contraalmirante Gilberto Santos Kerr, comandante de la División N.º 1 de la MB.
Las campañas de limpieza en playas y manglares es una de las 30 acciones previstas en el plan, que incluye instalar dispositivos de retención, como redes pluviales de recolección y barreras flotantes en ríos y afluentes, estimular la recolección selectiva y la logística inversa, donde las industrias deben recuperar los materiales que produjeron para su reutilización, reciclado o destrucción; dar un destino adecuado a aquellos que la población ya no utiliza, en los 274 municipios costeros a lo largo de 8500 km de costa, y alentar proyectos de innovación tecnológica para aprovechar el plástico recolectado en el ambiente marino.

La MB, cuya misión constitucional es vigilar los mares, controlar la contaminación del agua producida por embarcaciones, asegurar la navegación y salvaguardar la vida humana en el mar, tiene un interés especial en el plan. Para sellar este compromiso, el 28 de agosto, la MB, el Ministerio de Defensa, el Ministerio de Medio Ambiente y la Fiscalía General firmaron un acuerdo de cooperación técnica para combatir los desechos marinos y proteger las aguas jurisdiccionales brasileñas.
En el acuerdo, las medidas de la MB van desde vigilancia y combate de los delitos ambientales, hasta la prevención y la ayuda para combatir la contaminación de mares y ríos en la Amazonía Azul, un área de 3,5 millones de kilómetros cuadrados en el mar, que concentra las riquezas minerales y petrolíferas de Brasil.

“Las atribuciones de la Marina se relacionan con la prevención de la contaminación hídrica; sin embargo, ya que trabajamos en el mar, siempre es importante para nosotros mantener limpios los mares y las playas. Esto significa realmente colaborar con ese espíritu de preservación”, agregó el Contralmte. Kerr.
Colaboración estadounidense
Militares estadounidenses a bordo del USS Carter Hall aprovecharon su participación en el ejercicio multinacional UNITAS, que tuvo lugar del 19 al 30 de agosto en Brasil, para unirse a los esfuerzos de efectivos brasileños.
“Hay 13 países que participan en UNITAS, pero esta vez los estadounidenses sabían que realizaríamos medidas de conciencia ecológica, por lo que pidieron participar con nosotros. Para ellos es importante incursionar en este tipo de actividades”, destacó el Contralmte. Kerr. “El personal de la Marina de los EE. UU. es muy participativo y voluntarioso, siempre muy comprometido en actividades que presentan esa naturaleza cívico-social”.
Los militares brasileños y estadounidenses finalizaron trabajos de recolección manual de los residuos del área, con un total de 80 kg al finalizar la tarea. “La idea es que esta medida pueda impactar positivamente en las personas que visitan la playa, quienes también podrían comenzar a desempeñar un papel en la preservación del medio ambiente marino”, concluyó el Contralmte. Kerr.
El Capitán de Corbeta de la Marina de los EE. UU. Rick Williams, capellán a bordo del USS Carter Hall, habló sobre la importancia que tiene la acción conjunta. “Es maravilloso que podamos reunirnos con nuestros socios, hacer amigos de verdad mientras limpiamos esta playa. Demuestra la asociación y la amistad que unen a nuestras dos naciones”.