Autoridades de El Salvador desarrollaron operativos simultáneos a nivel nacional, del 23 al 26 de noviembre de 2020, que resultaron en el arresto de cientos de pandilleros y de otras bandas delictivas.
Entre los capturados hay 354 integrantes de la Mara Salvatrucha (MS-13), 256 del Barrio 18, y 119 de otros grupos criminales; los delincuentes fueron detenidos por homicidios, extorsiones, violaciones, drogas y robos, informó el 28 de noviembre en su portal oficial el ministro de Justicia y Seguridad Pública de El Salvador Rogelio Rivas.
“Hemos logrado impactar (…) de manera positiva en toda la criminalidad del país. Ha sido un operativo sin precedentes, en el cual hemos capturado a [729] individuos”, agregó Rivas.
El tráfico de drogas en pequeñas cantidades es una de las principales fuentes de ingresos de las pandillas, fondos que después lavan en pequeños negocios. Sólo la MS-13 recolecta unos USD 700 000 mensuales por narcotráfico, y más de USD 2 millones mensuales por extorsión a comerciantes y ciudadanos, reportó la agencia de noticias española EFE el 28 de noviembre.
Los múltiples operativos son parte de la iniciativa Escudo Regional, precisó la Fiscalía General de El Salvador en un comunicado del 26 de noviembre. Este operativo fue la cuarta fase de una operación conjunta, que comenzó en septiembre de 2017.
La Operación Escudo Regional es un esfuerzo conjunto de las instituciones de la aplicación de la ley de los países del Triángulo Norte (El Salvador, Honduras y Guatemala), con el apoyo de los Estados Unidos, que facilita la coordinación e intercambio de información para el combate a las pandillas, reportó el 26 de noviembre la Fiscalía General de El Salvador.
“Desde que iniciamos Escudo Regional hemos girado 21 500 órdenes de captura contra pandilleros, y hemos logrado condenar a casi 17 800 de ellos; un 80 por ciento de efectividad”, explicó por YouTube el 26 de noviembre el fiscal general de El Salvador Raúl Melara.
“Pese a que las pandillas han tratado de ingresar al tráfico a gran escala de cocaína, hasta la fecha no lo han podido lograr”, dijo el 23 de julio a Forbes Centroamérica Juan Gómez Hecht, experto de las Naciones Unidas contra la Droga y el Crimen para América Central y el Caribe. “La mayoría de la cocaína que circula por el istmo centroamericano lo hace vía marítima, y en el caso de El Salvador en aguas lejanas de su costa, y las pandillas no tienen capacidad de operar en estas aguas”.