En menos de una semana, la Policía Federal (PF) de Brasil confiscó unos 2300 kilogramos de cocaína, que iban a enviarse a Europa. Los cargamentos se descubrieron en tres de los principales puertos del país.
El 5 de octubre, la policía incautó 472 kg de cocaína en el puerto de Salvador, Bahía. “La droga estaba oculta en un cargamento de mineral ferruginoso que posteriormente iba a embarcarse hacia a Europa, más precisamente al puerto de Amberes, Bélgica, como destino final”, manifestó la PF en un comunicado.
El 3 de octubre, los efectivos detuvieron en plena acción a cuatro brasileños con 238,9 kg de cocaína en el puerto de Natal. “La droga iba a cargarse en un contenedor con rumbo a Europa”, informó la PF.
La incursión se llevó a cabo en conjunto con agentes de la Secretaría de Ingresos Federales, quienes interceptaron un camión sospechoso en la entrada del puerto. “Luego de una exhaustiva inspección, se encontraron varios paquetes de cocaína en la estructura de la carrocería, que estaban ocultos en un compartimiento adaptado en el chasis”, indicó la PF.
Además del conductor del vehículo, detuvieron a otros tres hombres que se encontraban cerca de la entrada del puerto y esperaban que se despachara el cargamento.
En 2020, los agentes incautaron 5,5 toneladas de cocaína en el puerto de Natal.
En otra operación conjunta que se llevó a cabo el 2 de octubre, la PF y la Secretaría de Ingresos Federales confiscaron 1520 kg de cocaína en el puerto de São Sebastião, en São Paulo.
“El estupefaciente estaba escondido en una embarcación, entre un cargamento de maíz. Tenía como destino la ciudad portuaria de Cádiz, en el suroeste de España”, informó la Secretaría de Ingresos Federales en una nota.
La embarcación, con bandera de Antigua y Barbuda y tripulación rusa, estaba anclada en San Sebastián a la espera de autorización para partir hacia Cádiz, informó la agencia EFE. La PF ha iniciado una investigación para averiguar quiénes son los autores del delito de tráfico internacional de drogas.
Aunque Colombia y Perú son los principales productores de cocaína, los traficantes prefieren exportar la droga desde puertos brasileños, debido al mayor intercambio comercial entre Brasil y Europa.
Según EFE, el catálogo de exportaciones de Brasil es bastante diverso, lo que facilita el ocultamiento de la cocaína entre contenedores de carga.