Sérgio Roberto de Carvalho, más conocido como el Pablo Escobar brasileño o el Mayor Carvalho, un ex miembro del servicio militar brasileño, ha sido arrestado en Budapest, la capital de Hungría, en una operación conjunta entre Interpol, la Policía Federal de Brasil (PF) y agencias extranjeras, informó la Agencia Brasil de Noticias. Carvalho, que fue detenido con documentos falsos en la madrugada del 21 de junio, está considerado por muchos investigadores especializados en este tipo de delitos como uno de los narcotraficantes más buscados del mundo.
Operación Enterprise
La detención se produce tras las investigaciones llevadas a cabo en el marco de la Operación Enterprise de la PF, que investigaba el blanqueo de dinero procedente del narcotráfico, y para la que las autoridades habían dictado una orden de detención contra Carvalho en 2020. En ese tiempo, las autoridades también incautaron más de USD 100 millones de la organización criminal liderada por Carvalho, informó el sitio web CNN Brasil.
Según información del sitio de noticias Pragmatismo, Carvalho era buscado en tres continentes, y desde 2017 había enviado cerca de 45 toneladas de cocaína a Europa, moviendo casi 500 millones de dólares. Además, según Pragmatismo, la droga era enviada a través de los puertos de Paranaguá, Santos, y otras ciudades del sur y noreste de Brasil. La droga tenía como destino los puertos de Amberes (Bélgica), Gioia Tauro y Livorno (Italia), Hamburgo (Alemania), Barcelona y Algeciras (España), Lisboa (Portugal) y Le Havre (Francia).
Muerte falsa
Carvalho fue detenido por primera vez en 1997, un año después de retirarse como oficial de la Policía Militar de Mato Grosso do Sul, donde trabajó durante 16 años. Carvalho está considerado como uno de los narcotraficantes más poderosos e influyentes de Sudamérica. El exmayor fue expulsado formalmente de la Policía Militar en marzo de 2018, según el sitio web UOL.
Carvalho, que operaba en Europa bajo la identidad falsa de un ciudadano surinamés llamado Paul Wouter, fue detenido en la ciudad española de Marbella en 2020. Antes de que las autoridades españolas descubrieran con quién estaban tratando, pagó su fianza y supuestamente contrató a una reputada cosmetóloga para que le ayudara a fingir su propia muerte, cuando la Fiscalía española estaba a punto de pedir su prisión preventiva.
La PF aún no ha confirmado si Carvalho será encarcelado en Europa o extraditado a Brasil para cumplir su condena.