La Fuerza Naval del Pacífico de la Armada de Colombia informó la destrucción de tres laboratorios con capacidad para producir cada uno al mes 2 toneladas métricas de clorhidrato de cocaína, en una ofensiva contra el grupo narco guerrillero Ejército de Liberación Nacional (ELN). Las operaciones se realizaron en el departamento del Chocó entre el 11 y el 22 de mayo.
“En la zona operan las comisiones de este frente de guerra, narcotraficantes y terroristas encargados de garantizar que la cadena logística del narcotráfico se cumpla”, dijo a Diálogo el Coronel Wisner Paz Palomeque, comandante de la Brigada de Infantería de Marina de Colombia N.º 2. “Son los que cobran por el gramaje [menudeo] y ya hacen parte de los exportadores de clorhidrato de cocaína”.
Dos de los laboratorios fueron ubicados en el Bajo Baudó, departamento del Chocó. El tercero fue encontrado en el Litoral de San Juan, al extremo sur del mismo departamento, informó la Armada; fueron confiscados insumos líquidos y sólidos junto con armas, equipos de comunicación y una embarcación con motor fuera de borda.
El Contralmirante de la Armada Nacional de Colombia John Fabio Giraldo Gallo, comandante de la Fuerza Naval del Pacifico, informó a Diálogo que las células del ELN se desplazan constantemente ante el asedio de las tropas y unidades fluviales que destruyen su infraestructura, especialmente sobre el río San Juan y sus afluentes.
“Los controles efectuados por las unidades sobre las arterias fluviales les ha limitado el ingreso de insumos para la fabricación de estupefacientes, y han afectado su eslabón financiero de la cadena logística del narcotráfico”, explicó el Contralmte. Giraldo.
Entre enero y mayo de 2020, la Fuerza Naval del Pacífico destruyó 18 laboratorios operados por el ELN, en la zona del río Baudó y el río San Juan. La producción anual frenada por la destrucción de estas estructuras es de 180 toneladas de pasta base de coca, dijo la Armada.
“El Chocó era un departamento donde se cultivaba caña de azúcar y arroz”, recordó el Cnel. Paz. Pero “se metieron las FARC [Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia], el ELN, el Clan del Golfo, Estructura Pacífico, y convencieron a la población para cambiar sus cultivos por el de pasta de coca y ganar mucho dinero; el mismo que después le quitan sus células dedicadas a la extorsión”, finalizó.