Una vez más, Brasil fue sede de la Conferencia Anual Latinoamericana de Buques de Guerra y Patrulleros de Ultramar. Representantes de las marinas de 15 países, entre ellos Argentina, Estados Unidos, Guatemala, Guyana, Honduras, México, Nicaragua, Perú y Uruguay, se reunieron en Río de Janeiro del 25 al 27 de junio de 2019. Es la cuarta vez que la conferencia tiene lugar en Brasil desde su inicio en 2012. Las ediciones anteriores tuvieron lugar en Colombia en 2014, Ecuador en 2015, Perú en 2016 y Chile en 2017. Brasil fue sede en 2012, 2013 y 2018.
En la apertura del evento militares brasileños brindaron un panorama sobre la MB. El Vicealmirante de la MB José Augusto Vieira da Cunha de Menezes, comandante en jefe de la Marina, recordó que la fuerza tiene la responsabilidad de proteger a la llamada Amazonia Azul, una zona marítima de 3,5 millones de kilómetros cuadrados que concentra las riquezas minerales y petrolíferas de Brasil.
Nuevas embarcaciones
El Valmte. Cunha dijo que para cumplir esa misión es fundamental el Programa de Desarrollo de Submarinos (PROSUB), que ya construyen cuatro sumergibles convencionales y uno de propulsión nuclear.
“Pero la Armada de Brasil no es solo una marina de guerra, sino que también desarrolla programas sociales, contribuye al desarrollo de la industria de defensa, está comprometida con acuerdos internacionales y realiza misiones de búsqueda y rescate”, dijo el Valmte. Cunha. “La Marina de Brasil necesita embarcaciones marítimas debidamente probadas, que sean confiables y estén equipadas con alta tecnología para cumplir con nuestras miles de tareas y misiones”.
Lucha combinada contra amenazas comunes
La mayoría de los asistentes destacó la importancia que tiene la participación de los militares en misiones internacionales, los entrenamientos con otras marinas y el intercambio de experiencias y colaboración entre los países para luchar contra los peligros que amenazan a la seguridad de la región.
“La Armada Nacional de Uruguay es conocida por su compromiso con las misiones de paz, aún con una flota de menos de 5000 miembros. En los últimos años participamos en varias misiones internacionales. Tenemos dos bases en la Antártida y además realizamos misiones de búsqueda y rescate, control de fronteras y de aguas jurisdiccionales, en un área que equivale al doble de la superficie del país”, dijo el Contraalmirante (R) Ricardo Della Santa, comandante en jefe de la Armada Nacional de Uruguay.
Otro de los temas abordados por el Contralmte. Della Santa fue la intención de continuar la renovación de la flota de la Armada Nacional de Uruguay. Para superar el desafío presupuestario el funcionario señaló que Uruguay estaba considerando comprar embarcaciones de otros países, como las corbetas brasileñas clase Inhauma. “Hoy, en el primer día del encuentro, pude hacer contactos interesantes para los proyectos que pretendemos realizar y es probable que aquí encontremos colaboradores para hacerlos realidad”, destacó el Contralmte. Della Santa. La conferencia es una excelente manera de encontrar soluciones a esos problemas.
El Capitán de Navío José Jorge Fortín Aguilar, jefe de la Fuerza Naval de Honduras, recordó las dificultades encontradas para proteger toda la frontera marítima de su país, y afirmó que la prioridad es la lucha contra el narcotráfico. “De enero a junio de 2019 arrestamos a 35 personas, confiscamos 223 kilogramos de cocaína y 69 kg de pasta de cocaína. Necesitamos más personal, nuevas embarcaciones y más entrenamiento para cumplir la misión. Construimos un patrullero costero que se entregará en diciembre”, dijo el Cap. de Nav. Fortín.
Al final de la conferencia, los participantes hicieron un recorrido a bordo del patrullero oceánico P120 Amazonas, que se incorporó a la MB en 2012 para satisfacer las necesidades de vigilancia de la Amazonia Azul. La embarcación se caracteriza por su gran autonomía y tiene capacidad para operar con un helicóptero y lanchas.