China inició el montaje de la antena del Radio Telescopio Chino-Argentino (CART) en el complejo astronómico El Leoncito, en la provincia argentina de San Juan, el 23 de noviembre, generando inquietudes entre expertos pese a su importancia por ser el mayor de Sudamérica.
Con un avance del 20 por ciento, se proyecta que para mayo de 2024 se complete el radiotelescopio, que tendrá un plato de 40 metros de diámetro, funcionando completamente para finales del año, reportó el Diario de Cuyo, con sede en San Juan, Argentina.
“China busca expandir su alcance de vigilancia global para supervisar las actividades de Estados Unidos y países de la OTAN. Este objetivo se replica en Argentina, Brasil, Cuba y Venezuela”, dijo a Diálogo el profesor titular de Relaciones Internacionales en la Universidad de Panamá, Euclides Tapia. “El radiotelescopio no se enfoca en explorar la luna, sino bastante más abajo”.
El proyecto CART, dirigido por la Academia de Ciencias de China, en colaboración con la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ) y el gobierno provincial, apunta a expandir la investigación astronómica y en áreas como la geodesia, la astrofísica y la georreferenciación, precisó Diario de Cuyo.
Las agencias chinas implicadas en el proyecto chino-argentino tienen vínculos directos con el Ejército Popular de Liberación (EPL), lo que genera la posibilidad de uso militar, señaló el Instituto de Políticas de Seguridad y Desarrollo (ISDP), una organización de investigación en estudios internacionales, con sede en Suecia.
CART podría conectarse con FAST, el radiotelescopio más grande del planeta, de 500 metros de diámetro, en Guizhou, China, detalló la organización sueca. Para el Gobierno de Xi Jinping, Argentina resalta por su ubicación estratégica, la disposición de sus gobernantes y por coincidir en su expansión de poder económico y militar.
“China aprovecha el rezago tecnológico en los países latinoamericanos, como en el caso de Argentina, para obtener beneficios que se alinean con sus intereses nacionales”, indicó Tapia. “Latinoamérica desconoce las implicaciones y objetivos reales de las inversiones y proyectos que Pekín está llevando a cabo en la región”.
Desde junio de 2023, más de 30 científicos y técnicos chinos han contribuido a la construcción del radiotelescopio, con una inversión proyectada de USD 40 millones, según reporta el portal News ArgenChina y un informe de la UNSJ.
ISDP apunta que las regulaciones vigentes limitan la soberanía argentina frente a las actividades chinas en su territorio, una situación común en otros acuerdos. El periódico Tribuna, de Buenos Aires, señala que como sucede con la estación Espacio Lejano, en la provincia argentina de Neuquén, CART está bajo control militar chino. “No hay ninguna instalación civil china que no tenga un doble uso”, agregó Tapia.
Espacio Lejano destina solo el 10 por ciento de su tiempo a científicos argentinos. El Gobierno argentino no “interfiere ni interrumpe” las actividades de China en la estación neuquina, que usa tres bandas del espectro electromagnético, dos de ellas para fines oficiales, incluyendo aplicaciones militares, refiere la revista española Política Exterior.
Africanización y seguridad
Los intereses chinos están evolucionando hacia proyectos estratégicos
en Argentina, desde control del espacio aéreo hasta instalaciones estratégicas en áreas territoriales. ISDP señala una concentración de inversiones e iniciativas de infraestructura en zonas clave como Neuquén, Ushuaia (Tierra del Fuego, Antártida e islas del Atlántico Sur) y San Juan.
Según ISDP, en 2014 se inició el primer proyecto entre el Programa Chino de Exploración Lunar (bajo el EPL) y la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) de Argentina. Espacio Lejano, la base china en Bajada del Agrio fue inaugurada en 2017. La instalación posee una antena de 110 toneladas y 35 metros de diámetro.
El segundo proyecto chino implica la construcción de un puerto multifuncional en Tierra del Fuego, cerca de la Antártida argentina. China ha presionado a las autoridades nacionales y locales para su rápida realización. Este proyecto, valorado en USD 300 millones, refleja la tendencia de inversiones chinas en Latinoamérica: sumas millonarias sin considerar impactos ambientales ni geopolíticos, reporta ISDP.
La expansión china en la Patagonia y Tierra del Fuego es un proceso en evolución que merece un seguimiento cercano, señala ISDP.
“Argentina tiene una creciente dependencia de China, donde las implicaciones económicas atraparon al país en una relación que resulta difícil de romper”, expresó Tapia. “Esto es parte de la estrategia china para establecer un núcleo de influencia en la región, generando preocupaciones sobre una posible africanización”.
La presencia china genera preocupaciones sobre el control de las comunicaciones en caso de conflicto, desafiando la seguridad hemisférica, señaló Tapia. “El hecho de que China no forme y no quiere formar parte del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca, plantea interrogantes sobre las garantías en situaciones de crisis”.
Independencia
Según ISDP, se anticipa un aumento de la presencia china en Argentina debido a su ubicación estratégica, recursos naturales y lejanía de zonas conflictivas. China parece enfocarse en controlar áreas logísticas cruciales, en lugar de buscar la prosperidad económica del hemisferio sur, precisó.
“El Gobierno argentino debe mantener su independencia de China y Rusia para evitar posibles presiones económicas, como las que Pekín ejerció en Sri Lanka, donde obtuvo control sobre un puerto. Es vital evitar la dependencia y mantener la soberanía nacional, ya que China busca ejercer control sobre Argentina”, remachó Tapia.