La Operación Verde Brasil y las nuevas tecnologías fueron esenciales para combatir los focos de incendio en el norte de Brasil.
La Operación Verde Brasil congregó a comandos militares articulados con organismos de seguridad pública, entidades estatales de protección ambiental y agencias federales, estatales y municipales, para combatir los incendios en la Amazonia. La operación, que comenzó el 24 de agosto y finalizó el 24 de octubre, consiguió los siguientes resultados luego de dos meses de ejecución: contención de 1835 focos de incendios, aplicación de multas por USD 35 millones a aserraderos, madereras ilegales, agricultores y personas involucradas en incendios o actividades de deforestación en la Amazonia, incautación de 23 000 metros cúbicos de madera talada ilegalmente, confiscación de 290 vehículos y embarcaciones y 127 arrestos.
Para garantizar estos resultados, el Ministerio de Defensa empleó tecnología del Centro Operativo y de Gestión del Sistema de Protección (CENSIPAM), que cuenta con tres centros regionales en Manaus, Belém y Porto Velho, en los estados Amazonas, Pará y Rondônia, respectivamente. “El CENSIPAM utiliza datos generados por una infraestructura tecnológica compuesta por sistemas integrados de sensores remotos, radares, estaciones meteorológicas y plataformas de recopilación de datos instaladas en la región amazónica. Gracias a este equipamiento, el Sistema de Protección de la Amazonia tiene la capacidad de monitorear la región y generar información casi en tiempo real”, informó a Diálogo la oficina de Comunicación Social del Ministerio de Defensa.
SAR Amazonia
Entre los principales proyectos del CENSIPAM está el radar de apertura sintética (SAR en inglés) Amazonia, integrado a satélites, para monitorear la superficie terrestre. “La tecnología SAR tiene la capacidad de visualizar el terreno, incluso bajo las nubes. De este modo, en temporada de lluvias torrenciales en la Amazonia, que dura aproximadamente ocho meses, el radar puede tomar imágenes del terreno y monitorear la deforestación. La información obtenida genera alertas de deforestación, que se envían a los organismos de control ambiental”, manifestó el Ministerio de Defensa.
El CENSIPAM también desarrolla el Sistema de Monitoreo y Alerta Hidrometeorológica, que envía informes y alertas sobre focos de calor para los equipos que trabajan en la Operación Verde Brasil. Según el Ministerio de Defensa, a principios de 2020 se instalarán dos antenas más en Manaus y Formosa, en Goiás, con un rango de cobertura que incluye todo el bioma amazónico y el mar territorial, y podrá recibir información directa de satélites nacionales e internacionales.
Ojos de Águila
Otra herramienta importante es la nueva aplicación Ojos de Águila, una plataforma de comunicación entre agencias asociadas para recibir información sobre actividades ilícitas en la Amazonia, como la minería ilegal, pistas de aterrizaje clandestinas, deforestación y focos de incendios. La nueva aplicación es un desarrollo del CENSIPAM y su funcionamiento es simple y rápido.
Por ejemplo, un usuario toma la fotografía de un incendio y puede agregar distintas observaciones, como la intensidad del fuego, entre otras. La localización geográfica se obtiene en forma automática con el GPS del celular o computador que se esté utilizando. Dado que la mayoría de los focos de incendio en la Amazonia están fuera del área de cobertura de Internet, la aplicación almacena toda la información recopilada en la base local de datos. Una vez que el dispositivo entra en una zona con conexión, sincroniza la información con la base de datos del CENSIPAM. El agente de campo define la información a la que desea acceder.
“La aplicación ha sido ampliamente utilizada por las Fuerzas Armadas y miembros de agencias gubernamentales en toda la región amazónica. Los agentes la utilizan durante vuelos de reconocimiento o misiones terrestres”, expresó el Ministerio de Defensa. Con la información obtenida de la aplicación puede facilitarse la planificación de las operaciones de campo y la toma de decisiones por parte del comando de la misión. Además, el CENSIPAM podrá utilizar esta información para validar y calibrar los datos recibidos de los satélites.