En la invasión de Rusia a Ucrania, los hackers utilizan y viralizan escenas de videojuegos para simular supuestos ataques y avances de las tropas rusas, en un intento por cambiar la narrativa y desinformar.
En respuesta, la industria del videojuego puso freno a la creación de fake news (noticias falsas) y deepfakes (una composición de los términos “deep learning” y “fake”) tomadas de escenas de guerra en sus juegos para desinformar, suspendiendo la venta y eliminando la presencia rusa de sus productos. Además, realiza actos de solidaridad en iniciativas concretas y recaudaciones de fondos para ayuda humanitaria.
Un clip de War Thunder, un videojuego de combate aéreo, terrestre y naval, fue uno de los primeros en utilizarse para desinformar, asegurando que una escena correspondía a un supuesto ataque con misiles antiaéreos a las tropas en Ucrania, expuso el portal de noticias de tecnología Xataka México.
Escenas de Arma 3, otro videojuego de combate táctico militar, también fueron manipuladas para hacer creer que un avión de combate ruso evitaba ser derribado por misiles luego de haber lanzado bombas en Ucrania, de acuerdo con el sitio español 20 minutos.
A esto se suman los populares deepfakes, montajes de imágenes o videos manipulados en los que alguien dice o hace cosas que nunca dijo o hizo.
Entre los deepfakes viralizados es el del presidente de Rusia Vladimir Putin, anunciando por Twitter un supuesto acuerdo de paz con Ucrania el 16 de marzo. Desde el principio resultó sospechoso, y horas después se confirmó que la imagen correspondía a un video de febrero de 2022, cuando las tropas rusas aún no habían invadido Ucrania.
Respuesta conjunta
Wargaming, desarrolladora del videojuego World of Tanks, anunció el 4 de abril que decidió abandonar sus operaciones comerciales en Rusia y Bielorrusia; incluyendo el cierre de su estudio en Minsk, Bielorrusia.
Epic Games, desarrolladora del juego Fortnite, informó ese mismo día que logró recaudar USD 144 millones junto a Xbox de Microsoft, para ayudar a organizaciones como Direct Relief, UNICEF, el Programa Mundial de Alimentos de la ONU, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y World Central Kitchen.
Electronics Arts declaró el 16 de marzo, “Nos solidarizamos con el pueblo de Ucrania (…). Con vigencia inmediata, los jugadores y equipos en Rusia y Bielorrusia no son elegibles para participar en Apex Legends Global Series y EA SPORTS FIFA 22 Global Series”.
Por su parte, Sony confirmó el 9 de marzo la suspensión de todos los envíos de software y hardware, así como las operaciones de PlayStation Store en Rusia. Haciendo un llamado por la paz en Ucrania, el gigante del videojuego también anunció la donación de USD 2 millones al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y a la ONG internacional Save the Children, “para apoyar a las víctimas de esta tragedia”.
Ese mismo día, Nintendo confirmó su decisión de retrasar la fecha de lanzamiento de Advance Wars 1+2: Re-Boot Camp, un videojuego de estrategia militar para Nintendo Switch, “a la luz de los recientes acontecimientos mundiales”.
Finalmente, el gigante tecnológico estadounidense Microsoft, propietario de la consola Xbox, confirmó el 4 de marzo la suspensión de la venta de nuevos productos y servicios en Rusia. De igual forma, indicaron que están brindando tecnología y apoyo financiero para las ONG claves.
“Desde que comenzó la guerra hemos actuado contra el posicionamiento ruso y las medidas destructivas o disruptivas contra más de 20 organizaciones gubernamentales, de TI y del sector financiero de Ucrania”, publicó Microsoft. “También hemos actuado contra los ataques cibernéticos dirigidos a varios sitios civiles adicionales. Hemos planteado públicamente nuestra preocupación de que estos ataques contra civiles violan la Convención de Ginebra”.