El Comité Latinoamericano de Seguridad Interior (CLASI), se comprometió a potenciar la colaboración y coordinación entre las naciones aliadas –con el apoyo de AMERIPOL y EUROPOL–, como estrategia para mejorar la seguridad en el hemisferio, informó la cadena argentina de noticias Infobae.
“Hoy debemos enfrentar a una delincuencia organizada sin fronteras”, expresó la ministro de Gobierno y del Interior de Ecuador Mónica Palencia, durante el evento donde recibió la presidencia del Comité, el 13 de marzo. “Estamos en la lucha por la seguridad de una ciudadanía que desea la libertad democrática, de expresión y de empresa, con responsabilidad social”.
El CLASI fue creado el 2 de marzo de 2022 como un espacio de análisis y coordinación para abordar la problemática del crimen transnacional organizado en Latinoamérica. Entre otras, sus tareas incluyen la elaboración de planes estratégicos plurianuales y el fortalecimiento de AMERIPOL, como instancia de cooperación policial en la región.
Además, el Comité articula la respuesta Estatal a conflictos internos o externos y promueve el diálogo de seguridad entre Latinoamérica y la Unión Europea. Su misión básica es combatir al crimen organizado, los ataques cibernéticos como el robo de datos, los ataque de infraestructura crítica o la desinformación en línea, que pueden tener impacto significativo en la seguridad nacional y la estabilidad social, informó el diario ecuatoriano Primicias.
El Comité está compuesto por representantes de alto nivel de los ministerios del Interior de varios países de Latinoamérica. Inicialmente fue constituido por Argentina, Bolivia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Panamá y República Dominicana, con la adhesión posterior de Chile, México, Paraguay y Uruguay; y con Perú en proceso de incorporación. A partir de marzo de 2024, Ecuador asumió la presidencia pro tempore por el periodo de un año
Al recibir el liderato, Ecuador propuso coordinar políticas públicas de seguridad para Latinoamérica, evaluar la creación de nuevos instrumentos de cooperación, impulsar planes de acción operativa y gestionar un encuentro de oficiales de enlace policial del CLASI, entre otros, informó el diario ecuatoriano La Hora.
“Desde 2017, a través de AMERIPOL, las agencias de control de Latinoamérica han recibido capacitación de alto nivel de instituciones con las mejores credenciales en el planeta; por ejemplo el entrenamiento que el Centro para la Ciberseguridad e Investigación del Cibercrimen (Centro para CIC), desde la prestigiosa Boston University, le brindó a un nutrido grupo de policías sudamericanos en el rastreo de criptomonedas y cibercriminología”, explicó el 15 de abril a Diálogo el Teniente Coronel de la Policía de Colombia (R) Mike Toro, experto en ciberseguridad, e investigador del Centro para CIC. “Esta clase de entrenamientos seguramente estarán en la agenda de apoyos a Ecuador, al igual que la detección de opioides sintéticos en la red oscura [dark web] y un área de reciente aparición en las esferas de la seguridad ciudadana: la implementación de robots policías”.
“La prospectiva que dio origen a AMERIPOL desde noviembre del 2007, de seguro inyectará nuevas líneas de colaboración”, añadió Toro. “La ciberseguridad ciudadana y la forense digital basada en algoritmos de aprendizaje de maquina con inteligencia artificial, permitirá no sólo responder a los actores armados, sino también la anticipación a los delitos y la predicción de tendencias de violencia que afectan a los ecuatorianos”.
Ecuador ya planteó algunas líneas de cooperación en materia de seguridad con los Países Bajos y Chile, que incluyen intercambios de información, apoyo con tecnología, revisión de rutas del narcotráfico y creación de unidades especializadas, publicó Primicias.
“Una de las primeras acciones para fortalecer la cooperación entre países y mejorar la seguridad regional en Latinoamérica es el intercambio de inteligencia entre las fuerzas de seguridad. Este mecanismo permite compartir información sobre amenazas y delitos transnacionales, así como estrategias efectivas para combatirlos”, dijo a Diálogo Alexandra Mantilla Allan, perfiladora criminal y consultora de investigaciones forenses de Ecuador. “Se podrán establecer acuerdos para la extradición de criminales y la coordinación en operaciones conjuntas. Asimismo, se promoverá la creación de centros de cooperación policial en Latinoamérica, para que los agentes de diferentes países trabajen en coordinación contra el crimen transnacional”.
La escalada exponencial de la violencia en Ecuador tiene su explicación en la internacionalización de las redes criminales, plantea un análisis de Anna Ayusso, investigadora del Centro de Asuntos Internacionales de Barcelona, “Dejaron de usar al país como ruta de tránsito y lo convirtieron en centro de producción y distribución de pasta de coca, con destino a los Estados Unidos, México, Europa y Brasil”, asegura.
“La cooperación es fundamental para establecer estrategias para reducir el narcotráfico”, agregó Mantilla Allan. “La lucha contra el narcotráfico requiere medidas de prevención y control en las fronteras, fortalecimiento de inteligencia y de investigación criminal, desarrollo de programas de rehabilitación, reinserción social y cooperación entre los sectores público y privado”.
Para comenzar su función, Ecuador creó un Comité de Manejo de Crisis, “encargado de coordinar acciones interinstitucionales (…) en momentos de crisis de seguridad, para articular la respuestas y toma de decisiones inmediatas para solucionar la crisis”.