En 2023, hasta el 20 de diciembre, la Armada de Colombia incautó 24 semisumergibles en el Pacífico colombiano, en cumplimiento al Plan de Campaña Estratégico Conjunto Ayacucho, el plan militar que acompaña la intención del Gobierno de la “Paz total”.
Los narcotraficantes emplean este método para sacar drogas ilícitas por la capacidad que tienen estos artefactos para llevar más cantidad de drogas y porque han evolucionado, pues tienen más hidrodinámica y son más difíciles de detectar por parte de los radares o de las aeronaves, como lo explicó a la emisora La W el Capitán de Navío de la Armada de Colombia Juan Pablo Pinilla Acosta, jefe de Estado Mayor de la Fuerza Naval del Pacífico.
“[Las incautaciones son] producto de la integración interagencial regional donde los gobiernos se han comprometido en la lucha contra el narcotráfico y han permitido el cierre, bloqueo y desarrollo de operaciones marítimas de manera sostenida, sobre los principales corredores marítimos utilizados para el transporte de estupefacientes”, dijo a Diálogo el Vicealmirante de la Armada de Colombia Orlando Grisales Franceschi, jefe de Estado Mayor Naval de Operaciones. “Uno de los pilares fundamentales en este ámbito es el entrenamiento y experiencia del talento humano, que integrados con las capacidades operacionales y logísticas de la Armada Nacional han permitido que nuestra fuerza sea pionera y referente para la interdicción de artefactos navales tipo semisumergibles”.
La incautación número 24 fue reportada a mediados de noviembre en aguas del Pacífico sur colombiano. Al realizar la inspección en el interior del semisumergible, tripulado por tres personas, las unidades de Guardacostas hallaron 94 bultos que contenían presuntas sustancias ilícitas.
“A su llegada a muelle fueron puestas a disposición de las autoridades competentes [las sustancias incautadas], que al realizar la prueba de identificación preliminar homologada PIPH confirman el resultado como positivo para clorhidrato de cocaína, con un peso neto de 1886 kilogramos”, dijo a los medios el Teniente de Navío de la Armada de Colombia Julián Mauricio Díaz Barragán, comandante de la Estación de Guardacostas Primaria de Tumaco. Al parecer los narcotraficantes pretendían llevar el cargamento hacia Centroamérica, de acuerdo con la institución naval.
También en noviembre, la Armada de Colombia reportó la destrucción de dos semisumergibles que fueron hallados en una zona de mangles en el área rural del municipio de Tumaco, Nariño. Las tropas de la Brigada de Infantería de Marina N.º 4, adscritas a la Fuerza de Tarea Conjunta de Estabilización y Consolidación Hércules y del Comando Contra el Narcotráfico y Amenazas Transnacionales encontraron los dos artefactos, cada uno con capacidad para transportar cerca de 4 toneladas de estupefacientes.
Por su parte, a comienzos de octubre, la Fiscalía General informó sobre una operación contra el narcotráfico que se llevó a cabo en coordinación con la Armada de Colombia y la Administración para el Control de Drogas de los EE. UU. “De acuerdo con la Fiscalía, jueces de control de garantías de Tumaco (Nariño), impusieron medidas de aseguramiento en el centro carcelario, a cuatro ciudadanos ecuatorianos y tres colombianos que transportaban algo más de 6 toneladas de cocaína en dos semisumergibles”, publicó el periódico El Tiempo.
En el primer trimestre de 2023, se produjo la incautación del artefacto más grande en 20 años. Medía 30 metros de largo por 3 de ancho, contenía más de 3 toneladas de alcaloides, y estaba tripulado por tres colombianos que se dirigían a Centroamérica. “Contaba con una autonomía superior a todos los semisumergibles incautados en esta zona, lo que evidencia que las organizaciones del narcotráfico se adaptan a las necesidades de carga y autonomía, mejorando la estructura y capacidad de propulsión de estas embarcaciones artesanales para transportar los estupefacientes de manera dinámica y segura”, puntualizó el Valmte. Grisales.
Las organizaciones de narcotráfico que emplean este tipo de artefactos tienen injerencia delictiva en los departamentos del Cauca y Nariño, en donde operan en alianza con los grupos armados residuales de estos departamentos. De esta manera, dichos grupos garantizan la construcción, la seguridad y los corredores de movilidad, para su salida al mar y su entrega a Centroamérica, dice el Valmte. Grisales.
“El reto de mayor relevancia [para encontrar estos semisumergibles] es la dificultad que representa la detección de este tipo de embarcaciones, ya que su estructura física y motora hace compleja la ubicación, debido a que le permite ocultarse en el mar durante su navegación”, puntualizó el Valmte. Grisales. “Por lo anterior, la inteligencia naval precisa juega un papel fundamental para continuar afectando a estos medios de envío de estupefacientes”.