Desde que el régimen nicaragüense Ortega-Murillo rompió su vínculo diplomático con Taiwán, los nexos entre Nicaragua y la República Popular de China se han fortalecido en diversas áreas estratégicas.
Un ejemplo son las frecuentes reuniones de altas autoridades de los dos países. El 16 de noviembre, los presidentes de los parlamentos de Managua y Beijín sostuvieron un encuentro virtual, a un año del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones, señaló el medio oficialista nicaragüense El 19 Digital.
“La alianza entre los dos países encaja perfectamente como cóncavo y convexo a sus intereses. Los Ortega-Murillo tienen un aliado más para sostener su dictadura” dijo a Diálogo el 26 de noviembre Jorge Serrano, experto en seguridad y miembro del equipo de asesores de la Comisión de Inteligencia del Congreso de Perú. “China tiene en Managua a un país pequeño, con ubicación geoestratégica cerca de los Estados Unidos”.
Nicaragua rompió el 10 de diciembre de 2021 sus lazos con Taiwán, considerada como provincia rebelde, luego de que la Organización de los Estados Americanos (OEA) y el grueso de la comunidad internacional rechazaran la legitimidad de los comicios donde Ortega se auto reeligió por tercera vez consecutiva, indicó el portal alemán DW.
Más protagonismo
Este nuevo aliado político del régimen de Ortega-Murillo entregó el 12 de noviembre a la Policía Nacional de Nicaragua, acusada de cometer genocidio y graves violaciones a los derechos humanos, una cantidad desconocida de equipos y materiales de defensa, reportó el diario La Prensa, de Managua.
“Esta donación muestra como China comienza a ocupar el lugar de Rusia en el fortalecimiento de la dictadura Ortega-Murillo”, manifestó Serrano. “Moscú no puede proveer esos recursos, porque no los tiene”.
En abril de 2018, la policía nicaragüense fue acusada de asesinar a más de 300 civiles que protestaban contra Ortega. En 2018 y en 2020 el Gobierno de los EE. UU. sancionó a la policía nicaragüense, así como a su jefe Francisco Díaz, señala el Departamento de Tesoro de los EE. UU.
“El Kremlin está en un grave problema por el conflicto que creo en Ucrania, por lo que cedió a China su rol hegemónico en Nicaragua, quien también suplirá la producción de armamento para las fuerzas de seguridad nicaragüenses”, señaló Serrano. “Beijín (…) va a envolver totalmente a Nicaragua”.
La violencia del régimen no solo es practicada por la policía, sino también por elementos paraestatales que actúan con la connivencia del régimen, muestra un reporte del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos. Desde el restablecimiento de las relaciones, Nicaragua y China firmaron diversos acuerdos de cooperación para establecer mecanismos de consultas políticas, y acuerdos macro de apoyo y de participación comercial, entre otros, reporta la agencia española de noticias EFE.
Desestabilización
“China avanza inexorablemente en la región del Caribe”, advirtió Serrano. “Nicaragua es un factor de desestabilización en la región y la presencia de China, por gravedad política, va a atraer a otro país a su eje como satélite. Beijín es muy hábil para eso. Ya no estamos hablando solamente de un país”.
En este nuevo rol China “podría facilitar, apoyar, promover e incitar que la dictadura en Nicaragua, a cambio de protección y el sostenimiento de los recursos que le va a dar, facilite el tránsito de drogas y de insumos para el fentanilo, para que los cárteles mexicanos lo produzcan”, asegura Serrano.
Hay muchos riesgos con la influencia china en Latinoamérica, desde facilitar la corrupción hasta aumentar las amenazas a la seguridad de los países hasta sus abusos medioambientales.
Más presión internacional
En abril, la OEA requirió al régimen de Ortega-Murillo desmantelar su sistema opresivo, y llamó a la comunidad internacional a incrementar la presión política sobre el régimen para que Nicaragua retome el camino de la democracia, reportó en Internet el medio independiente nicaragüense Despacho 505.
“La presión internacional tiene que venir primero de nuestro continente a través de una comisión de alto nivel de la OEA. Si la dictadura se niega, como es muy probable, hay que hacerla no elegible para créditos del sistema financiero internacional”, concluyó Serrano. “Se debe ejercer ya más presión política y económica. China está teniendo un perfil más decidido para posicionarse en Nicaragua”.