La Academia Militar Agujas Negras (AMAN), ubicada en Resende, estado de Río de Janeiro, es la institución de educación superior encargada de la formación profesional de oficiales de combate del Ejército Brasileño (EB). Recientemente, la escuela fue sede del ejercicio combinado CORE 21/Vanguardia Sur 22, entre el EB y el Ejército de los EE. UU. Diálogo conversó con el General de División Paulo Roberto Rodrigues Pimentel, director de la institución, poco después de finalizado el ejercicio, el 16 de diciembre.
Diálogo: ¿Es común que AMAN sea sede de ejercicios militares?
General de División Paulo Roberto Rodrigues Pimentel: Es común que cedamos nuestra área para ejercicios con otras organizaciones militares de Brasil, pero fue la primera vez con un ejército extranjero.
Diálogo: El 27 de noviembre, 391 aspirantes a oficiales se graduaron aquí en AMAN, siete de los cuales eran extranjeros: uno de Guyana, uno de Paraguay, dos de Senegal, uno de Timor Oriental y dos de Vietnam. ¿Esto ocurre con frecuencia?
Gral. de Div. Pimentel: La AMAN tiene un prestigio internacional bien consolidado. Por eso, las naciones amigas nos buscan desde hace ya varios años para que sus cadetes puedan asistir a los cursos de la escuela. En promedio, son unos 10 cadetes por año.

Diálogo: ¿Cómo se lleva a cabo este proceso, es decir, cómo eligen los países a los cadetes que vienen a estudiar?
Gral. de Div. Pimentel: Eso depende de cada país. Algunos de estos cadetes nunca tuvieron contacto con la vida militar. Ellos concursan, quedan seleccionados (quizás) entre los primeros clasificados y los países los envían aquí. Uruguay, por ejemplo, siempre envía un cadete que ya es oficial formado. Llega después de haber finalizado la Academia Militar y solo se queda un año con nosotros. Entonces, varía según las necesidades de cada país.
Diálogo: ¿Y en lo que respecta a doctrina?
Gral. de Div. Pimentel: En el fondo, todos somos soldados. La base es la misma. Los fundamentos son los mismos. La ética es la misma. Pero cuando regresan a sus países, obviamente deben pasar por una adaptación necesaria para adecuarse a la doctrina local.
Diálogo: En la ceremonia del 27 de noviembre por primera vez se graduaron mujeres en AMAN, después de cinco años de curso. ¿Podría comentarnos cómo fue el proceso de adaptación para que esto fuera posible?
Gral. de Div. Pimentel: Este proyecto comenzó hace mucho tiempo. Es un proyecto de inserción del segmento femenino en la Línea de Instrucción Militar Bélica. Hubo un período de adaptación de la infraestructura antes de su llegada. Se realizaron estudios sobre cómo sería su participación en la academia. Puedo decir que el proyecto fue todo un éxito. Lo hicieron muy bien.
Obviamente no todas se graduaron. Ingresaron 40 a primer año, pero se graduaron 23 por distintas razones. Estas mujeres se destacan entre los mejores estudiantes. Un desempeño fantástico. Fue exactamente la misma exigencia para hombres y para mujeres. Existe una pequeña diferencia en la gráfica del índice de Entrenamiento Físico Militar, lo cual es natural, pero la exigencia en el campo, en los ejercicios, fue exactamente la misma y lo hicieron muy bien. Puedo decir que el Ejército salió ganando con la integración de las mujeres, que en el futuro podrán convertirse en generales y comandar batallones, etc.
Diálogo: ¿Por qué se considera a la AMAN una institución de instrucción militar de referencia, no solo en la región sino también en el mundo?
Gral. de Div. Pimentel: La academia tiene 210 años y poco a poco ha ido acumulando experiencia y perfeccionando sus procesos. Yo diría que está a la vanguardia en lo que respecta a la preparación del oficial. Lo que tenemos es lo mejor en metodología, en la preparación del futuro líder, en la creación de un compromiso con la fuerza.
Diálogo: ¿Qué legado espera dejar a su sucesor?
Gral. de Div. Pimentel: Espero dejar una academia un poco más organizada administrativamente. Los procesos académicos se ampliaron durante estos años. La academia duplicó su tamaño en los últimos 30 años, y tal vez no se pudo acompañar [este crecimiento] con la estructura que involucra a los recursos humanos. Entonces, lo que estamos haciendo ahora, y pretendo dejarlo de legado a mi sucesor, es el proyecto Mariscal José Pessoa; es decir, trabajamos en una infraestructura que ya tiene 77 años, para que el próximo comandante pueda mejorar aún más lo que nosotros venimos haciendo.
Para ver la entrevista completa con el General de División Paulo Roberto Rodrigues Pimentel, vaya al siguiente enlace: https://dialogo-americas.com/es/articles/entrevista-con-el-general-de-brigada-del-ejercito-de-brasil-paulo-roberto-pimentel-comandante-de-la-aman/#.Yf1h7lXMLZ4