Se perfila un escenario amenazador en la región: la calculada expansión de Irán hacia Latinoamérica. Los expertos advierten de los esfuerzos de Teherán por establecer un punto de apoyo en el hemisferio occidental, acercándose a regímenes afines, con el objetivo de amenazar la democracia y la estabilidad. Sin embargo, la región comienza a tomar nota.
El 14 de abril, el Gobierno argentino elevó a Alto el nivel de alerta, ante posibles atentados terroristas en su territorio, horas después de que Irán lanzó un ataque con más de 300 drones y misiles contra Israel. Las fuerzas de seguridad argentinas reforzaron la vigilancia en instituciones judías, aeropuertos y pasos fronterizos.
La Policía Federal Argentina (PFA) se declaró en Alerta naranja, según el portal argentino de noticias Infobae. En Buenos Aires, vehículos de la PFA permanecieron a la espera, frente a sinagogas y clubes judíos. “El estado de alerta máxima incluyó el refuerzo de la vigilancia existente en puntos como la Embajada de Israel, la Casa Rosada y diversos puntos de la comunidad judía en todo el país”, dijo Infobae, señalando que la región de la Triple Frontera (Argentina, Brasil y Paraguay) también es monitoreada.
Es la segunda vez en menos de 72 horas que Argentina eleva su nivel de alerta antiterrorista. La primera fue el 11 de abril, cuando salieron a la luz los primeros informes de inteligencia de los Estados Unidos sobre un posible ataque iraní a Israel, informó el canal de noticias argentino TN. Ese mismo día, el máximo tribunal penal argentino concluyó que Irán había planeado el atentado perpetrado por Hezbolá en 1994, contra el centro comunitario de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), en el que 85 personas murieron y 300 resultaron heridas.
El 12 de abril, durante un simposio liderado por la Organización de Estados Americanos (OEA) en Washington D.C., altos diplomáticos y expertos advirtieron sobre la amenaza latente que representan Irán y sus apoderados para Latinoamérica, informó Infobae. El evento subrayó la urgencia de combatir el antisemitismo y la perniciosa influencia del régimen iraní en la región, especialmente en un momento de crecientes tensiones en Oriente Medio.
Durante su intervención, el secretario general de la OEA Luis Almagro, afirmó que la lucha contra el antisemitismo es un pilar fundamental en la defensa de la democracia y los derechos humanos. “El antisemitismo está presente en las Américas y hemos sufrido sus ataques”, dijo Almagro. “Los regímenes autocráticos que están aquí tienen estrechos vínculos con Irán y sus apoderados”.
Analistas internacionales advierten que las instituciones judías de los países latinoamericanos podrían ser blanco de un nuevo ataque iraní. “Lo peor sería ignorar la determinación de Irán de llevar a cabo cualquier ataque”, dijo a Diálogo Luis Fleischman, profesor de sociología y ciencias políticas en la Universidad Estatal de Palm Beach en Florida.
“Irán no tiene escrúpulos. No sólo la venganza iraní puede afectar a una embajada israelí o estadounidense, sino que una comunidad judía local también puede ser el blanco, como sucedió en AMIA en Argentina; y como quedó demostrado con el reciente arresto de Lucas Passos Lima (…), quien fue reclutado para espiar a comunidades judías en Brasil”, dijo Fleischman.
La presencia de Irán en Brasil
Passos Lima formaba parte de una red vinculada a la organización terrorista Hezbolá, que planeaba llevar a cabo atentados en territorio brasileño. La red fue desmantelada a finales de 2023, durante la Operación Trapiche de la Policía Federal Brasileña (PF). En marzo, el Proyecto de Investigación sobre el Terrorismo (IPT), un grupo de análisis sin ánimo de lucro, reveló en un informe que la sombra de Irán estaba detrás del complot terrorista en Brasil.
Según documentos de la PF, los dos cerebros de la conspiración, el sirio Mohamad Khir Abdulmajid y el libanés Haissam Housin Diab, ambos nacionalizados brasileños buscados por Interpol, tenían fuertes vínculos con el Centro Cultural Beneficente Islámico de Brasília (CCBIB).
“Este centro chií ha sido financiado por Irán desde 2019”, aseguró el IPT en el informe. “Los documentos de la Policía Federal revelan que Abdulmajid fue el principal promotor de la creación del CCBIB”.
La investigación de la PF indicó que Abdulmajid y Diab eran los responsables de localizar a los brasileños que serían reclutados por Hezbolá. “Los preseleccionados eran invitados a viajes al Líbano, planeados y pagados por agentes de la organización terrorista”, informó GloboNews, de acuerdo con documentos de la justicia brasileña.
“Irán penetró en Latinoamérica hace mucho tiempo. Actúa no sólo utilizando sus embajadas como centros de espionaje, sino también en combinación con organizaciones criminales locales e internacionales, mezquitas y con un aparato de propaganda muy desarrollado”, advirtió Fleischman.