La Armada de Colombia interceptó el semisumergible más grande de su historia, en el Pacífico Colombiano, a mediados de mayo. El artefacto, tripulado por tres colombianos que se dirigía a Centroamérica, medía 30 metros de largo, 3 metros de ancho y estaba cargado con 3058 kilogramos de clorhidrato de cocaína.
Los radares de los buques de la Armada de Colombia identificaron la embarcación sospechosa en el Pacífico sur, mientras una aeronave de la Fuerza Aérea Colombiana, con apoyo de la Fuerza de Tarea Conjunta Interagencial Sur, del Comando Sur de los EE. UU., hicieron el seguimiento hasta que unidades guardacostas pudieran realizar la interdicción. La operación conjunta se realizó en medio de condiciones atmosféricas adversas.
“Las unidades de la Armada […] se enfocaron en salvaguardar y proteger la vida de los [tres] tripulantes del semisumergible, teniendo en cuenta que el artefacto presentaba una entrada de agua”, dijo a los medios el Capitán de Navío de la Armada de Colombia Juan Pablo Pinilla Acosta, jefe de Estado Mayor de la Fuerza Naval del Pacífico. Después de poner a salvo a los tripulantes y recuperar los 102 bultos con la carga ilegal, el artefacto fue hundido.
Solo meses atrás, en marzo, se evidenció el riesgo que corren quienes asumen este tipo de travesías ilegales, cuando unidades de la Armada recuperaron dos cuerpos sin vida del interior de otro artefacto. En esa oportunidad la embarcación sufrió un accidente, por la generación de gases tóxicos del combustible que transportaba.
“Los semisumergibles y los sumergibles son cascos de madera recubiertos de fibra de vidrio”, dijo a Diálogo el Vicealmirante Orlando Enrique Grisales Franceschi, jefe de Estado Mayor Naval de Operaciones de la Armada de Colombia. “Entonces la seguridad en la navegación es muy muy baja, y están construyéndose particularmente en los esteros que encontramos al sur del área de responsabilidad operacional colombiana, como son los departamentos del Cauca y Nariño”.
Además de los 11 semisumergibles incautados en 2023 hasta mediados de mayo, las Fuerzas Militares de Colombia desarticularon dos estructuras criminales dedicadas a fabricarlos, la última de estas a finales de marzo, al capturar a 12 integrantes de una organización narcotraficante transnacional que fabricaba semisumergibles para traficar clorhidrato de cocaína.
Las capturas se dieron mediante una operación en la que participaron la Armada de Colombia, el Ejército Nacional y la Fiscalía General de la Nación, con la Guardia Civil Española.
Dicha organización criminal construía los semisumergibles para transportar clorhidrato de cocaína hacia Centroamérica y Europa, y posiblemente se encargaba de migrar el fenómeno de la construcción de semisumergibles a países de la región sobre la costa Atlántica, como Brasil y Guyana. “Esta operación afecta a esas organizaciones que son pioneras en la construcción de semisumergibles y que afectan obviamente a las comunidades globales en el transporte de alucinógenos”, dijo a la prensa el Almirante Francisco Cubides Granados, comandante de la Armada de Colombia.
Las autoridades saben, mediante la recopilación de inteligencia, qué grupo hace el lanzamiento desde tierra, y cuáles son sus redes de apoyo tanto en los países de tránsito como de llegada. Los resultados operacionales revelan que hay diferentes rutas para estas embarcaciones, explicó el Valmte. Grisales.
La ruta del Pacífico pasa por el sur de las Islas Galápagos en Ecuador y cambia el rumbo hacia el norte para llegar a las costas mexicanas; la del Caribe sale de las costas colombianas, transita a través del archipiélago de San Andrés y Providencia, y llega a las costas de Honduras hacia el Golfo de México, informa el Valmte. Grisales. Se sabe de la construcción de los mismos cascos en las Guayanas, de donde parte una ruta que atraviesa el Atlántico para llegar a África y a costas europeas sobre el Atlántico Norte.
Por otra parte, la evolución de estas formas para transportar sustancias ilícitas es notable. “El primer semisumergible incautado [en 1993] tenía una capacidad de carga de 300 a 500 kg y una autonomía de navegación de unas 400 millas náuticas”, puntualizó el Valmte. Grisales. “Los semisumergibles que hoy estamos [interceptando] tienen una capacidad de carga de 6 a 8 toneladas y una autonomía de navegación de cerca de las 2500 a 3000 millas náuticas, con motores dentro y fuera”.
“Lo que se ha detectado es que con los semisumergibles, una célula de transporte ofrece los servicios de este tipo de embarcaciones, empleados por varias organizaciones de manera simultánea; es decir, una organización pequeña puede usar estas modalidades si coordina con otros grupos de traficantes, lo que se envía con las diferentes marcas de la droga detectadas en los envíos”, explicó el Valmte. Grisales. “Las organizaciones grandes prácticamente están ligadas a grupos armados ilegales como las disidencias de las FARC [Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia], el Clan del Golfo y el ELN [Ejército de Liberación Nacional], pero también aparecen en el escenario de organizaciones de crimen trasnacional de América y Europa”.
Desde 1993 hasta mediados de mayo de 2023, la Armada de Colombia interceptó e incautó 228 artefactos ilegales tipo semisumergible y sumergible, informó la institución naval.