Ecuador superó por tercer año consecutivo las 200 toneladas de droga incautadas, indicó la Dirección de Investigación Antidrogas de la Policía Nacional. La cantidad decomisada lo sitúa como el tercer país del hemisferio que más estupefacientes decomisa, solo por detrás de Colombia y los Estados Unidos, indicó el diario digital ecuatoriano Primicias. Ecuador se convirtió en los últimos años en un punto clave del tráfico mundial de narcóticos, pues las mafias aprovechan sus puertos y costas para enviar cientos de toneladas de contrabando hacia Europa y Norteamérica.
Según el informe de la Policía de Ecuador publicado en su cuenta de X, entre enero y diciembre de 2023 incautaron 206 toneladas de narcóticos, para lo cual ejecutaron 8541 operativos. Durante las intervenciones detuvieron a 10 843 personas y desarticularon a 82 organizaciones delictivas.
“Paulatinamente Ecuador se transformó de ser un país de paso de la droga, a uno que es centro de distribución y almacenamiento de ésta, similar a Bolivia, lo que trae aparejado el involucramiento del crimen organizado transnacional”, dijo el 8 de enero a Diálogo el periodista peruano Pedro Yaranga, experto en seguridad integral y narcotráfico en Sudamérica. “Esta actuación del crimen organizado conlleva el control de la droga, la extorsión a los empresarios, chantajes entre las mismas bandas y otros ilícitos”.
“En Ecuador, en la década de 2000 a 2010, se generó una debilidad institucional, que permitió una expansión evidente de las bandas de crimen organizado y donde éstas comienzan a desarrollar redes que llevan al control territorial, con el narcotráfico como el gran elemento de financiamiento”, dijo a Diálogo Guillermo Holzmann, analista internacional y académico de la Universidad de Valparaíso, Chile. “A su vez, también por la corrupción, se empezó a usar el puerto de Guayaquil, como salida que permite no solamente ir hacia los EE. UU. sino también hacia Centroamérica, pasando a ser parte de la cadena logística del crimen organizado, particularmente de las bandas de narcotráfico, pero también de traficantes de armas y de personas que básicamente se consolidaron”.
La Policía de Ecuador destacó un ligero aumento de las incautaciones frente a 2022, cuando los decomisos totalizaron 201 toneladas de droga. En 2021 y 2020, la Policía ecuatoriana confiscó 210 toneladas y 128 toneladas, respectivamente.
Mientras, las autoridades destruyeron 467 toneladas de narcóticos durante 2023, requisados en diferentes operaciones del periodo que recién terminó y de años anteriores, anunció en X la Policía Nacional, organismo encargado de custodiar las sustancias ilícitas hasta el momento final de su eliminación.
El 16 agosto de 2023, los EE. UU. y Ecuador suscribieron una carta de acuerdo para garantizar la cooperación continua en su lucha contra el narcotráfico, la corrupción y otros delitos transnacionales, incluso mediante la capacitación y el equipamiento de funcionarios encargados de hacer cumplir la ley y del sector judicial durante los próximos 10 años, informó la Embajada de los EE. UU.
“Los EE. UU. están con Ecuador en la lucha contra el crimen organizado y la búsqueda de la justicia”, dijo el Embajador estadounidense Michael Fitzpatrick. “Estamos comprometidos con nuestra alianza en los sectores de la seguridad, justicia y el Estado de derecho hoy, mañana y durante todo el tiempo que sea necesario, para mitigar las amenazas urgentes que enfrentan nuestros países (…). Estamos unidos”.
La declaración de Fitzpatrick surgió luego de que el 9 de agosto, el candidato a la presidencia de Ecuador Fernando Villavicencio fuera asesinado durante su campaña presidencial, al salir de un mitin político al norte de Quito. Días antes del homicidio, Villavicencio había denunciado una serie de amenazas contra él y su equipo de trabajo, de parte de bandas criminales dedicadas al narcotráfico.
“El pueblo ecuatoriano espera respuestas de sus nuevas autoridades en la Asamblea y en el Ejecutivo, porque los corruptos, los narcos y aquellos que los blindan y empoderan, están luchando para capturar otros sectores del Estado, como el sector judicial”, dijo Fitzpatrick en la Convención de la Organización de las Naciones Unidas contra la Corrupción, el 7 de diciembre. “Si los corruptos y los narcos y sus protectores políticos y económicos saben que de verdad no van a ganar dinero con sus jugadas ilegales, no van a tomar los riesgos”.
“Para mejorar la situación de seguridad en Ecuador, debe fortalecerse la institucionalidad en general, comenzando por las fiscalías, la policía y la inteligencia criminal; específicamente para poder generar la evidencia necesaria que permita desbaratar las distintas bandas”, remarcó Holzmann. “Además debe fortalecerse el sistema judicial, crear cárceles y que éstas sean realmente segregadas, penalizar adecuadamente la corrupción, tener una hoja de ruta orientada a disminuir la corrupción en las policías y a su vez una capacidad de protección a los agentes del Estado”.