Los medios de comunicación y funcionarios alineados con el Kremlin tratan de desviar la atención de la responsabilidad de Moscú por el aumento de la inseguridad alimentaria mundial, indicó el Departamento de Estado de los Estados Unidos (DOS) en un comunicado.
La crisis alimentaria se agrava debido a la guerra provocada por el presidente ruso Vladimir Putin contra Ucrania. No fue causada como dice Rusia por las sanciones tomadas por los países democráticos para sofocar el esfuerzo bélico ruso, detalló.
“Esto es un claro chantaje a Occidente y a la comunidad internacional”, dijo a Diálogo Mario Morales, analista y profesor de la Universidad Javeriana, de Colombia. “Rusia aprovecha la crisis alimentaria desde su perspectiva desinformativa con fines ideológicos, valiéndose de los medios que tiene distribuidos por el mundo y de las locuciones, presentaciones, y discursos cada vez que pueden, desde parlantes diplomáticos”.
Intenciones oscuras
“Frente al fracaso de su ofensiva militar que pretendía ocupar todo el territorio ucraniano en pocos días Rusia abrió otro frente, usando lo que el expresidente ruso Dmitry Medvédev calificó de arma silenciosa: las exportaciones de alimentos”, aseguró el 3 de julio el embajador de la Unión Europea (UE) en México Gautier Mignot, en el diario mexicano El Financiero.
Aunque la inseguridad alimentaria crecía antes de la invasión, Moscú agravó esa tendencia. “El Kremlin minó los campos de cereales ucranianos y bloqueó todos los puertos del mar Negro para impedir la exportación de granos ucranianos. Además, continúa robando miles de toneladas de grano ucraniano para su propio beneficio”, abundó el DOS el 22 de junio.
Ucrania era uno de los principales proveedores de grano para decenas de países de África, Oriente Medio y partes de Europa, y “ha pasado de ser ‘un granero a estar en la fila del pan’, mientras el gobierno ruso utiliza la desinformación para engañar al mundo sobre la causa de esta crisis”, dice el DOS. Rusia provoca miedo para señalar como culpable a Occidente con esa falsa narrativa, agregó Morales.
Los Estados Unidos y la UE actúan para mitigar la inseguridad alimentaria en los países más afectados, como muchos de África. También ayudan a los campesinos ucranianos a mantener su producción y encontrar rutas alternativas de exportación, precisó Mignot. El bloqueo de las exportaciones ucranianas puede provocar la hambruna de 40 millones de personas este año, abundó.
En Latinoamérica; “deberíamos preocuparnos por dos razones: primero, porque es una información apocalíptica, negativa y equivocada”, comentó Morales. “Y segundo porque es una cortina de humo. Pretende desviar la atención de la preocupación mundial por Ucrania”.
Unir esfuerzos
Latinoamérica se ha visto afectada en el costo por exceso de demanda, explicó Morales. Los precios de alimentos, combustibles y fertilizantes duplicaron su precio en los últimos dos meses, reportó la revista colombiana Semana.
La Organización de los Estados Americanos (OEA) lanzó en junio el Centro para la Integridad de Medios de las Américas, para apoyar el periodismo independiente y la producción de contenidos serios y rigurosos, en apoyo a la defensa de la democracia en las Américas, desenmascarando propaganda falsa como la rusa.
“Es esencial para la sostenibilidad de cualquier democracia que la ciudadanía tenga información relevante y objetiva”, dijo el secretario general de la OEA Luis Almagro durante el lanzamiento del nuevo centro. “Ese derecho es desafiado abiertamente por actores malintencionados que utilizan indebidamente las múltiples tecnologías de comunicaciones (…) para difundir información intencionalmente errónea, para promover sus intereses a cualquier costo”.
“La única alternativa para desinstalar la desinformación rusa no es jugar con lo mismo, sino jugar con todo lo contrario. Es decir, frente a la emoción la razón; y la razón debe ser con consistencia en propagación de contenidos asociados a la verificación de los hechos. La OEA y otros organismos (…), podrían ayudar en esta perspectiva”, concluyó Morales.