
La Fuerza de Tarea Conjunta Bravo (JTF-Bravo en inglés) del Comando Sur de los Estados Unidos y la Embajada de los EE. UU., en coordinación con los estamentos panameños Servicio Nacional de Fronteras (SENAFRONT), Servicio Nacional Aeronaval (SENAN), y el Ministerio de Salud, se reunieron una vez más para participar en el ejercicio de respuesta a emergencias y asistencia humanitaria Mercurio III, que se desarrolló del 22 de marzo al 1.º de abril, en Panamá.
El objetivo del ejercicio fue reforzar las capacidades de respuesta conjunta ante desastres naturales. En esta edición, “más de 500 personas de diferentes comunidades de la provincia del Darién recibieron atención médica”, informó un video de NEX Noticias en YouTube.
“Simulacros como el ejercicio Mercurio III nos prepara para integrarnos en caso de emergencias mientras brindamos beneficios reales a la población. Esto nos permite responder rápidamente ante las crisis, especialmente cuando ocurren dos desastres naturales seguidos como sucedió en el 2020 con los huracanes Eta e Iota”, dijo el Coronel del Ejército de los EE.UU. Steven Gventer, comandante de la JTF-Bravo, durante la ceremonia de clausura.
El ejercicio desplegó uno de los 12 hospitales de campañas donados por los EE. UU. a Panamá, que fue instalado para atender la salud de la población en la comunidad de Sambú, e incluyó una gira médica en la comarca Emberá-Wounan, en el Tapón del Darién, fronterizo con Colombia.

El total de la carga movilizada por aeronaves tipo Chinook y Blackhawk fue de aproximadamente 150 toneladas que incluyó, aparte de insumos médicos y alimentos, materiales de construcción para nueve comunidades y cuatro bases del SENAFRONT.
“Gracias a estos ejercicios estamos mejor preparados para brindar una respuesta conjunta ante un desastre natural, como sucedió hace más de un año, cuando el huracán Eta golpeó Chiriquí, y la Fuerza de Tarea Conjunta Bravo puso a disposición sus helicópteros para apoyar a las autoridades panameñas”, agregó el jefe de misión de la Embajada de los EE. UU. Stewart Tuttle.
Las sesiones de entrenamiento de respuesta a desastres naturales para los participantes incluyeron ejercicios de deslizamiento por soga rápida, para responder en tiempo y forma en maniobras de rescate.
“Ha sido un trabajo conjunto que llevamos adelante en alianza estratégica desde las inundaciones de noviembre del año 2020, en la comarca Ngöbe Buglé y la provincia de Darién. Ha quedado demostrada la efectividad de esta alianza con los Estados Unidos que ha funcionado no solo en la seguridad, sino también en la ayuda humanitaria”, dijo el ministro de Seguridad Pública de Panamá Juan Manuel Pino.