A fines de 2017, las Naciones Unidas declararon el 5 de junio como día internacional de lucha contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR). Sin embargo, en la cuarta celebración de la campaña anual de concientización, siguen aumentando los desafíos globales.
Aproximadamente 3300 millones de personas, casi la mitad de la población mundial, dependen del pescado para satisfacer el 20 por ciento de sus fuentes de proteína animal. Sin embargo, el 93 por ciento de las principales reservas marinas de peces del mundo se consideran plenamente explotadas, sobreexplotadas o significativamente explotadas.
Con la esperanza de cambiar el rumbo de la pesca INDNR, la Guardia Costera de los Estados Unidos (USCG en inglés), publicó su “Perspectiva estratégica sobre pesca ilegal, no declarada y no reglamentada” en septiembre de 2020, en donde identificó a la pesca INDNR como la principal amenaza a la seguridad marítima mundial, por delante de la piratería.
“Si no se controla, la pesca INDNR amenaza la estabilidad geopolítica de todo el mundo, porque perjudica la economía de los Estados costeros, aumenta las tensiones entre naciones pesqueras y debilita las estructuras gubernamentales”, expresó la Vicealmirante Linda Fagan, comandante del Área Pacífico de la USCG.
Si no se controla, la pesca INDNR amenaza la estabilidad geopolítica de todo el mundo, porque perjudica la economía de los Estados costeros, aumenta las tensiones entre naciones pesqueras y debilita las estructuras gubernamentales”, Vicealmirante Linda Fagan, comandante del Área Pacífico de la USCG.
La USCG, lista para trabajar con naciones que se comprometan a terminar con el flagelo de la pesca INDNR, les pregunta a éstas cómo pueden trabajar con los EE. UU. para lograr este objetivo.
La USCG ha sido la principal institución estadounidense encargada de hacer cumplir, por más de 150 años, las leyes de protección de recursos marinos vivos. Sus autoridades, destrezas, capacidad y asociaciones, convierten al cuerpo en socio colaborador en la lucha contra la pesca INDNR. Su perspectiva estratégica se enfoca en tres áreas:
- Promover operaciones específicas y efectivas basadas en inteligencia.
- Combatir conductas estatales depredadoras e irresponsables
- Ampliar la cooperación multilateral en materia pesquera
La USCG ha liderado la lucha contra naciones y organizaciones que utilizan la pesca INDNR para debilitar la soberanía y la seguridad económica de otras naciones. En islas del Pacífico, Oceanía y el Pacífico occidental, la Operación Pacífico Azul se enfoca en la lucha contra la pesca INDNR y en el apoyo a los países socios, mediante patrullajes de control pesquero en alta mar y al cumplimiento de acuerdos bilaterales de embarque.
Los acuerdos bilaterales ponen en práctica el objetivo de la USCG, para ampliar la cooperación multilateral en materia de legislación pesquera y mejorar la seguridad y regulaciones marítimas regionales. Oficiales de control marítimo del país anfitrión viajan a bordo de los buques de la USCG que patrullan en la zona económica exclusiva (ZEE) del país anfitrión. A través de esta asociación, el país anfitrión aumenta su capacidad para hacer cumplir sus leyes soberanas de pesca, mientras que la USCG proporciona recursos operacionales y su experiencia en la aplicación de la ley.
El buque USCGC Kimball, de la Guardia Costera de los EE. UU. (CGC en inglés), completó recientemente un patrullaje de control de pesca INDNR en islas del Pacífico, en donde evaluó a 31 embarcaciones, y detectó una posible infracción. La USCG está aumentando su presencia en la región, con dos buques de seguridad nacional y tres buques de respuesta rápida desplegados en Honolulu, Hawái, y otros tres buques de respuesta rápida que se desplegarán en Guam. Estos recursos pueden brindar presencia policial constante en el Pacífico occidental y central.
En el Pacífico oriental la USCG realizó la Operación Kuartam, un esfuerzo conjunto entre el CGC Bertholf y la Armada del Ecuador en los alrededores de las Islas Galápagos.
Ecuador había expresado su preocupación a los EE. UU. por una gran flota pesquera de ultramar en el límite de la ZEE del país. Las autoridades sospechaban que la flota pesquera, principalmente China, incurría en pesca INDNR, además de dañar el frágil ecosistema de las Galápagos, lugar declarado patrimonio mundial de la UNESCO.
El CGC Bertholf se encargó de rastrear las embarcaciones oscuras, denominadas así por no transmitir su posición a los sistemas públicos de monitoreo, así como también las embarcaciones no registradas, y aquellas que realizan actividades contrarias a las reglamentaciones de la Organización Regional de Ordenación Pesquera y de la soberanía ecuatoriana. El CGC Bertholf maximizó el compromiso de la nación socia y realizó patrullajes junto al buque de guerra ecuatoriano LAE Isla San Cristóbal, en la ZEE ecuatoriana que rodea las Galápagos y en aguas internacionales. La operación mostró avances significativos para las asociaciones de Centroamérica y Sudamérica en la lucha contra la pesca INDNR.
La implementación de capacidades de la USCG de observación, recopilación e intercambio de información sobre actividades ilícitas en áreas remotas, muestra las diversas formas en que los EE. UU. pueden colaborar con las naciones en materia de vigilancia y protección de sus aguas.
Las reservas de peces a nivel mundial son un recurso valioso que proporciona seguridad económica y alimentaria a muchas naciones. No obstante, la pesca INDNR perjudica la seguridad regional y nacional, y socava el orden marítimo basado en reglas.