Brasil, más precisamente la ciudad de Natal, en Río Grande do Norte, fue uno de los organizadores de la sexta Conferencia Sudamericana de Defensa (SOUTHDEC en inglés). La SOUTHDEC, patrocinada por el Comando Sur de los Estados Unidos, fue creada para abordar asuntos que afectan la estabilidad y la seguridad de los países del hemisferio occidental. Esta primera edición realizada en Brasil abordó temas actuales que demandan esfuerzos conjuntos de los países presentes en el evento, como los desastres naturales y las amenazas transnacionales. Para hablar de este y otros temas, Diálogo conversó con el General Raul Botelho, jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Brasil.
Diálogo: ¿Cuáles son los principales desafíos regionales que los países del Cono Sur deben enfrentan en forma conjunta con los Estados Unidos?
General Raul Botelho, jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Brasil: Podemos destacar dos desafíos que tienen extrema relevancia: la asistencia humanitaria y respuesta ante catástrofes, y el combate a las amenazas transfronterizas. En la actualidad abordamos los desafíos, los mecanismos y las capacidades de respuesta regional a la crisis humanitaria en Venezuela, que nos enseña a compartir las diversas iniciativas y dificultades que enfrentan los países al abordar este problema. En cuanto a las amenazas trasfronterizas, el crimen organizado transnacional se muestra como una de las principales amenazas a la seguridad y la estabilidad en Sudamérica, en particular en lo que respecta al tráfico de armas y drogas.
Diálogo: ¿Por qué es importante para Brasil participar en las misiones de paz de la Organización de las Naciones Unidas (ONU)?
Gral. Botelho: La participación en operaciones de misiones de paz patrocinadas por la ONU permite un mayor entrenamiento e inserción de las Fuerzas Armadas de Brasil en operaciones internacionales en apoyo a nuestra política exterior. Este tipo de misión promueve una mayor proyección de Brasil en el grupo de naciones, lo que reafirma su compromiso con la defensa de la paz y la cooperación entre los pueblos, además de permitir el intercambio de conocimiento y el intercambio de experiencias con contingentes de otros países.
Diálogo: ¿Usted considera que Brasil es un buen socio militar para sus vecinos y los Estados Unidos? ¿Qué le faltaría para mejorar la relación entre los militares con las naciones amigas?
Gral. Botelho: Sí, creo que Brasil es un buen socio militar, no solo para sus vecinos latinoamericanos sino también para los EE. UU. y el mundo. Solo en 2019 se firmaron, o están listos para firmarse, más de una docena de acuerdos bilaterales de cooperación, memorandos de entendimiento y declaraciones de intención con diversos países. Aún nos quedan unos quince documentos de este tipo que están bajo revisión o negociación, que pronto se convertirán en acciones concretas de defensa. En cuanto a su relación con los EE. UU., se trata de un socio estratégico de larga data. Esta asociación se consolida cada día, como lo demuestran las mutuas visitas de intercambio de las autoridades de ambas naciones, acuerdos de cooperación firmados, una mayor participación brasileña en funciones importantes en el Comando Sur de los EE. UU. y, por supuesto, la aceptación de Brasil como aliado prioritario no-OTAN [Organización del Tratado del Atlántico Norte], recientemente aprobada por el Congreso de los EE. UU.
Así, veo que fortalecemos cada día los lazos de amistad y cooperación, permitiendo el alcance de los intereses regionales en materia de desarrollo y seguridad. En cuanto a las oportunidades de mejora en la relación entre militares de las naciones amigas, entiendo que el principal obstáculo a superar es la diferencia de enfoques en la legislación de cada país, en aspectos importantes para promover una mayor integración entre militares. Es necesario tener comprensión clara de la realidad política única de cada país y el respeto a su soberanía, como punto de partida para construir asociaciones destinadas a la integración militar regional en Sudamérica.
Diálogo: ¿Cuáles son sus prioridades como jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Brasil?
Gral. Botelho: Desarrollar una estrategia que proyecte un concepto moderno de trabajo conjunto, en el que las capacidades de defensa se establezcan mediante una metodología apropiada, impulsadas por prioridades de defensa consensuadas, alineadas con el diseño y las doctrinas actualizadas, para enfrentar cualquier hipótesis proyectada. Además, construir una estructura de inteligencia de defensa, que comprenda todos los segmentos de inteligencia con vistas a la producción de conocimientos confiables y oportunos, para apoyar el proceso de toma de decisiones y la formulación y ejecución de la planificación estratégica militar.