El 18 de marzo, el ministro de Defensa de Brasil Fernando Azevedo e Silva aseguró en una conferencia de prensa en el Palacio de Planalto, que la Marina, el Ejército y la Fuerza Aérea Brasileñas estaban a disposición de la sociedad para luchar contra el COVID-19 (coronavirus), ofreciendo recursos operacionales y logísticos.
“Lo que está sucediendo es una guerra. El enemigo es insensible, feroz y está decidido a actuar; en tiempos de guerra los brasileños pueden contar con las Fuerzas Armadas, que han estado junto a nuestra población en cada momento delicado e importante para Brasil, y así volverá a ser”, dijo.
El General de la Reserva del Ejército Fernando Azevedo, ordenó la creación de un Comité de Crisis en el Centro de Operaciones Conjuntas del Ministerio de Defensa. “Ya estamos trabajando para brindar toda la ayuda y asistencia que las Fuerzas Armadas podamos y debamos ofrecer. Con respecto a esto, recibiremos los pedidos a través del Comité de Crisis. Tenemos muchos recursos, en particular en lo que respecta a logística y gestión de los materiales. Para regiones de difícil acceso como el Amazonas, contamos con los medios necesarios para llegar hasta allí”, agregó.
Comandos Conjuntos
Los militares brasileños esperan ser desplegados para colaborar en los esfuerzos de lucha contra la pandemia. Para cubrir todo el territorio nacional se activaron 10 comandos conjuntos además del comando aeroespacial, cuyo funcionamiento es permanente. Según un comunicado de prensa difundido por el Ministerio de Defensa, varios municipios y estados ya han solicitado más apoyo de las Fuerzas Armadas.
Las unidades militares especializadas en defensa química, biológica, radiológica y nuclear, también podrán ser empleadas en tareas de descontaminación de personal, ambientes y materiales. El Ejército Brasileño podrá ayudar con el protocolo de diagnóstico, que se aplica a personas que podrían estar infectadas.
Las Fuerzas Armadas también ayudarán a controlar el acceso a las fronteras y apoyarán al Gobierno Federal en los controles de tripulación y pasajeros en aeropuertos, puertos y terminales. Los militares podrán instalar hospitales de campaña. La ayuda inicial consiste en el préstamo y la instalación de tiendas de campaña, que normalmente se utilizan para alojar al personal militar en el campo, pero que ahora servirán como puntos de diagnóstico, donde llegarán aquellas personas que podrían tener coronavirus, antes de ser transportadas a hospitales y centros de salud.
En los próximos días, las Fuerzas Armadas de Brasil podrían llevar a cabo nuevas tareas para combatir el COVID-19, como distribuir agua a familias necesitadas, coordinar la donación de sangre por parte de voluntarios militares y dar solución a otros pedidos de los departamentos de Defensa Civil de los distintos estados.