Los incidentes terroristas en Venezuela en 2019 reflejaron la creciente presencia y el control territorial del Ejército de Liberación Nacional, ELN, indicó el Departamento de Estado de los Estados Unidos en su informe anual presentado el 24 de junio.
El reporte expone que se incrementaron las confrontaciones entre el ELN, otros grupos armados ilegales colombianos y venezolanos, y las fuerzas gubernamentales venezolanas.
El informe del Departamento de Estado destaca que no hubo cambios en la legislación antiterrorista de Venezuela en 2019.
La seguridad fronteriza en los puertos de entrada era vulnerable y susceptible a la corrupción, también expuso el informe.
Destaca el texto del Departamento d Estado que el gobierno de Guaidó trabajó con socios regionales para invocar el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (también conocido como el Tratado de Río) en septiembre para abordar las actividades ilegales del régimen de Maduro, incluido el terrorismo y su financiación.
EE. UU. sanciona a capitanes de barcos iraníes por llevar petróleo a Venezuela
El secretario de Estado Mike Pompeo dijo el 24 de junio que Estados Unidos estaba imponiendo sanciones a cinco capitanes de barcos iraníes que habían entregado petróleo a Venezuela.
En declaraciones a los periodistas, Pompeo también dijo que Estados Unidos sigue apoyando al presidente interino Juan Guaidó.
Washington y la mayoría de los otros gobiernos occidentales han reconocido a Guaidó como el líder legítimo de la nación.
“Grandes avances” en la lucha internacional contra el terrorismo
Estados Unidos y sus socios hicieron grandes avances en el 2019 para derrotar y degradar las organizaciones terroristas internacionales, expresa el informe divulgado el 24 de junio.
El informe sobre terrorismo del Departamento de Estado agrega que a lo largo del año, varios países de Europa occidental y América del Sur se unieron a Estados Unidos para designar a Hezbolá, respaldado por Irán, como un grupo terrorista en su totalidad.
En 2019, Argentina, Kosovo, Paraguay y el Reino Unido se unieron a Estados Unidos para designar a Hezbolá como organización terrorista, rechazando la falsa distinción entre su “ala militar” y una supuestamente “ala política”.