El 11 de diciembre de 2020, la Marina de Brasil (MB) desplegó el submarino Humaitá (S-41), en el Complejo Naval de Ilha da Madeira, en Itaguaí, Río de Janeiro. Al evento asistieron el presidente de Brasil Jair Bolsonaro , el ministro de Defensa Fernando Azevedo e Silva, y el Almirante Ilques Barbosa Júnior, comandante de la MB.
Según la Agência Brasil, los submarinos convencionales, que tienen una capacidad operacional de hasta 80 días en el mar y funcionan con baterías recargables con motor diésel, pueden permanecer sumergidos por hasta cinco días. Las embarcaciones miden 71,6 metros, pesan 1870 toneladas y tienen capacidad para alojar a una tripulación de 35 militares, con un alcance que permite realizar tareas de vigilancia acordes a las dimensiones continentales de Brasil.
Estos submarinos pueden alcanzar los 400 metros de profundidad y su intervención garantizará un mayor control sobre la franja costera conocida como Amazonia Azul, que abarca el 67 por ciento del territorio brasileño. El Contraalmirante de la MB André Martins, gerente de Infraestructura Industrial del Programa de Desarrollo de Submarinos (PROSUB), manifestó a la Agência Brasil la importancia de salvaguardar la franja de la Amazonia Azul. “Es por donde pasa la mayor parte del comercio marítimo nacional y donde están los principales yacimientos petrolíferos del país”, expresó.
Durante la ceremonia también se llevó a cabo la integración del submarino Tonelero y la demostración de la etapa de construcción y prueba de los cinco submarinos previstos en el PROSUB. El programa prevé un total de cuatro submarinos convencionales y uno con propulsión nuclear, cuya construcción se estima que comenzará en 2022.
Submarino estadounidense
El submarino nuclear USS Vermont (SSN 792) de la Marina de los EE. UU. también estuvo presente en el Complejo Naval de Ilha da Madeira. Del 10 al 15 de diciembre, el buque norteamericano visitó Brasil por primera vez, para participar en ejercicios de guerra antisubmarina con el submarino brasileño Tupi (S-30), y aeronaves de patrullaje y reconocimiento marítimo, además de participar en el lanzamiento del Humaitá.
“Es un honor visitar la base submarina más nueva de Brasil y ver en primera persona el éxito que tiene el PROSUB de la MB con la construcción de los BNS Riachuelo, BNS Humaitá y BNS Tonelero”, indicó el Vicealmirante Daryl Caudle, comandante de la Fuerza de Submarinos de la Flota Atlántica de la Marina de los EE. UU. “El programa PROSUB juega un papel importante en el fortalecimiento de nuestros lazos bilaterales y en la base global de la seguridad regional. Continuaremos trabajando juntos para lograr nuestros objetivos comunes, para mejorar nuestra efectividad submarina combinada”, agregó.
Todd Chapman, embajador de los EE. UU. en Brasil, recibió al presidente Bolsonaro y a su comitiva a bordo del USS Vermont. En esa ocasión, se firmó un acuerdo de liderazgo para reafirmar la sólida historia de colaboración militar entre los EE. UU. y Brasil. “Esta visita reivindica nuestra sólida relación entre fuerzas militares y nuestro compromiso común con una asociación que ayuda a fortalecer la seguridad de cada una de nuestras naciones, como así también de todo el hemisferio”, indicó Chapman.