Las autoridades costarricenses informaron que en varias operaciones interagenciales desmantelaron una banda que operaba en la zona norte del país, y que trabajaba en conjunto con el Cártel de Sinaloa, de México.
“Se relaciona con un grupo criminal asentado en nuestro país, que tenía relación directa con el Cártel de Sinaloa, y que estaba utilizando nuestro territorio para exportar clorhidrato de cocaína hacia México”, dijo en conferencia de prensa el 10 de septiembre el director general del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Costa Rica Walter Espinoza.
Para llevar a cabo la operación se realizaron 11 allanamientos simultáneos el 9 de septiembre, donde los agentes costarricenses detuvieron a dos mujeres y siete hombres, informó el OIJ en un boletín de prensa. La banda enviaba cocaína a México principalmente por aire, utilizando diferentes pistas clandestinas de aterrizaje desde Costa Rica, abundó el OIJ.
“La policía judicial captó [en 2019] que en nuestro país estaba asentado un grupo criminal, dirigido por un sujeto de apellido Patterson”, dijo Espinoza. “El modo de operación de esta estructura criminal era almacenar clorhidrato de cocaína, ubicar pistas clandestinas en nuestro territorio, y utilizar estos sitios para que aterrizaran furtivamente y de manera ilegal aeronaves, para posteriormente trasladar esa droga hacia territorio mexicano”.
El grupo delictivo también traficaba armas de fuego. En las 11 operaciones fueron decomisados 358 kilogramos de cocaína y armas largas tipo AK-47, miniuzis y R-15; municiones y varios vehículos, agregó el OIJ.
El costarricense Patterson, líder de ese grupo, había sido ya detenido el 27 de marzo de 2020 en la provincia de Alajuela, junto a su mano derecha, otro costarricense de apellido Gómez, “cuando trasladaban consigo 259 paquetes con clorhidrato de cocaína (…), que iban a sacar de nuestro país utilizando pistas aérea clandestinas”, dijo Espinoza.
Patterson era el gerente y representante legal de una compañía dedicada al transporte de carga internacional que tenía a su nombre 23 equipos de transporte, los cuales, dijeron las autoridades, se utilizaban para el tráfico de drogas.
Otro miembro importante del grupo criminal, un mexicano de apellidos Leal García, quien era el enlace con el Cártel de Sinaloa, fue capturado el 26 de mayo en la provincia de Heredia, en un auto que transportaba 57 kg de cocaína, informó el OIJ.
En la banda también participaban otros tres sujetos que se dedicaban exclusivamente a encontrar y acondicionar pistas de aterrizaje clandestinas para mover la droga por aire, así como un policía que estaría vinculado al grupo criminal; todos se encuentran detenidos, informaron las fuerzas del orden.