Las Fuerzas Militares y la Policía Nacional de Colombia (PNC) dieron un revés a las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) al neutralizar a dos de sus principales cabecillas, Néstor Gregorio Vera, alias Iván Mordisco, y Roque Antonio González Contreras, alias Roque.
“El golpe a las disidencias de las FARC contribuirá de manera importante al proceso de desarticulación de dichos grupos delincuenciales, que luego del acuerdo de paz se han dedicado al crimen organizado, especialmente al tráfico ilícito transnacional de drogas”, dijo a Diálogo El Almirante (r) Jorge Moscoso Flores, el exjefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas del Perú. “Estas incursiones militares debilitan la organización de estos grupos armados y la neutralización de sus cabecillas afectan estas organizaciones que cuentan con estructuras militarizadas”.
“Cayó alias Roque, cabecilla del GAOR[grupo armado organizado residual] E-33 de las disidencias de las FARC en Tibú, Norte de Santander”, informó el entonces presidente de Colombia Iván Duque, luego que en una operación de la PNC y el Ejército colombianos, el 17 de julio.
Según reportó la prensa colombiana, alias Roque dirigía los patrullajes urbanos del Frente 33 en el nororiente de Colombia, y su captura se dio luego que se difundieran videos de disidentes vestidos con ropa de camuflaje y brazaletes de las FARC frente a la alcaldía municipal de Tibú, en un claro desafío a las autoridades sobre el control de dicho territorio.
Por otro lado, el entonces ministro de Defensa de Colombia Diego Molano informó el 10 de julio que otro cabecilla, Iván Mordisco, junto con otros nueve disidentes, fueron neutralizados durante la Operación Júpiter, en una zona selvática del suroeste del país, en el departamento del Caquetá.
“Con la muerte de Iván Mordisco dimos una estocada mortal a las disidencias de las FARC”, señaló Molano en Twitter. “Alias Iván Mordisco nunca entró al acuerdo de La Habana; buscaba refundar las FARC y expandirse con 8000 hombres armados”.
Molano explicó que entre las actividades ilícitas del criminal se encontraban narcotráfico, extorsión, y reclutamiento forzado. Tras la muerte de Miguel Botache Santillana, alias Gentil Duarte (uno de los criminales más buscados de Colombia y uno de los principales líderes de la disidencia de las FARC) en Venezuela en mayo de 2022, Mordisco asumió el liderazgo de los frentes disidentes que antes estaban bajo el mando de Duarte, indicó InSight Crime,organización dedicada al estudio del crimen organizado en Latinoamérica y el Caribe. ElGobierno ofrecía una recompensa de USD700 000, para quien brindara información sobre su paradero. Mordisco delinquía en la selva colombiana y los territorios fronterizos con Venezuela y Ecuador.
“Fueron meses de recolección de información, un proceso serio, con fuentes humanas y delincuentes de la misma estructura con los que tomamos contacto”, declaró a la prensa el General Jorge Luis Vargas, director de la PNC. “La inteligencia estaba focalizada sobre él, todo el proceso de recolección era para llegarle a él”.
Pedro Yaranga, experto peruano en temas de narcotráfico y terrorismo, señaló a Diálogoque la situación de inseguridad en Colombia, “es mucho más complicada de lo que se piensa” porque los disidentes de las FARC dominan terrenos en zonas fronterizas con Venezuela, Perú y Ecuador, en las que incentivan sus alianzas y vínculos económicos con el narcotráfico.
“La muerte de ambos disidentes de las FARC es un golpe considerable, pero ahora los disidentes están divididos en más de 30 grupos y una infinidad de cabecillas. Es decir que ya no es un solo grupo como eran antes las FARC”, afirmó Yaranga. “Ahora son varios grupos criminales, con un interés común en lo económico; pero sin un interés común político”.