El Mayor General retirado Hugo Carvajal Barrios, alias el Pollo, exdirector de Contrainteligencia Militar de Venezuela, fue extraditado el 19 de julio desde España a Nueva York, donde será procesado por lo que se describe como una vasta conspiración narcoterrorista que pretendía generar inestabilidad en los Estados Unidos, tratando de “inundar” al país con drogas ilegales de contrabando.
Este es el mismo caso por el que se solicitó internacionalmente las capturas del actual dictador venezolano Nicolás Maduro; del hombre fuerte del Partido Socialista Unido de Venezuela Diosdado Cabello; del expresidente del Tribunal Supremo de Justicia Maikel Moreno, del ministro de la Defensa Vladimir Padrino López y otros operadores del oficialismo en el país suramericano.
A pesar de estos recientes reveses, el Cártel de los Soles pareciera expandir sus operaciones, consolidando alianzas con grupos subversivos y cárteles de la droga mexicanos, afirman a Diálogo expertos en crimen transnacional en Latinoamérica.
Además de Carvajal, bajo las mismas acusaciones permanece en la cárcel el Mayor General venezolano Clíver Alcalá Cordones, señalado de facilitar el contrabando de alijos de cocaína suministrados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), entonces encabezadas por alias Iván Márquez y Jesús Santrich.
La expresidenta de la Comisión Nacional contra el Uso Ilícito de Drogas, Mildred Camero, sostuvo que Carvajal jugó un rol fundamental en la expansión internacional del Cártel de los Soles.
“En esas conexiones que se hicieron internacionalmente tiene mucho que ver el Pollo [Carvajal], porque él trabajaba la parte de inteligencia y sabía cómo realizar ese tipo de operaciones”, afirmó Camero el 30 de agosto en conversación con Diálogo. “A partir del dominio en Venezuela, se extendió la influencia de este grupo criminal hacia Colombia, México y Europa. Además, en los últimos años trazaron una ruta para el traslado de drogas hacia Argentina”.
Los alijos salen de Venezuela por las costas del estado Sucre y van por vía marítima al Cono Sur, recorriendo las costas orientales sudamericanas, agregó Camero. “Este grupo [Cártel de los Soles] tiene una extensión en verdad muchísimo más amplia de lo que tenía hace cinco o seis años atrás. O sea que estamos hablando de una estructura que ha ido ampliando operaciones”.
Acuerdos con guerrillas
El Cártel de los Soles obtuvo su nombre por la participación de generales como Carvajal y Alcalá en la estructura criminal. En Venezuela, los oficiales de este grado ostentan insignias bordadas en sus charreteras con emblemas de soles.
La información divulgada en julio por el Departamento de Justicia estadounidense recuerda que en 2008, Carvajal llegó a un acuerdo con representantes de las FARC. “El Cártel de los Soles le daría efectivo y armas a las FARC a cambio de un alza en la producción de cocaína”, indica la noticia.
En los últimos meses, sin embargo, los aliados de esa estructura criminal cambiaron, debido a la muerte de sus principales líderes en Venezuela y la posterior atomización de sus filas. En la actualidad, según el director de la ONG estadounidense Risk Awareness Council Alberto Ray, en el sector de suplidores de la cocaína manejada por el Cártel de los Soles figura en primer lugar el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y luego una constelación de pequeños grupos, concentrados primordialmente en el departamento colombiano Norte de Santander.
“Se generó una nueva alianza. Luego de la muerte de Gentil Duarte, las FARC terminaron trabajando junto con el ELN. Antes eran opuestos, ahora son aliados”, afirmó Ray el 2 de septiembre a Diálogo. “Por cierto, esa alianza se negocia en Cuba, el gran componedor de todo esto. Estos grupos tienen a Cuba como una oficina de arreglos legales. Entonces en Cuba se negocian los acuerdos desde el 2022”.
En una reciente presentación ante la ONG Observatorio Geopolítico de América Latina, Ray reveló que el 61 por ciento del territorio venezolano es controlado por grupos irregulares. Al ser interrogado al respecto, afirmó que el régimen de Maduro ya no posee la misma capacidad de antaño para entregar dinero a tales estructuras.
“Por eso les cede control territorial. En esos lugares impera una paz criminal. El modelo de paz criminal genera un estatus quo de intimidación que paraliza el cambio político”, explicó Ray. “Las bases para este sistema fueron sentadas cuando Carvajal era un oficial activo en Venezuela. Él [Carvajal] manejó cómo se formaron todas estas redes y eso tiene muchísimo valor para efectos judiciales”.